"Mujeres y disidencias necesitan urgentes y efectivas respuestas por parte del Estado, y no la negación de una problemática que nos arrebata la vida cada 41 horas", expresaron desde la organización feminista Mumalá, al dar a conocer las últimas cifras en relación a la violencia machista. Desde su observatorio, "Mujeres, Disidencias, Derechos", contabilizaron 21 muertes violentas, entre femicidios, femicidios vinculados y mujeres asesinadas en contextos de criminalidad organizada, en Santa Fe, en lo que va del año. En el mismo período, en todo el país relevaron 125 femicidios y 311 casos en grado de tentativa, que dan cuenta de la necesidad de políticas de prevención y atención. También apuntaron a los estados provinciales.

Frente a esos datos que preocupan, para Mumalá está claro que "las políticas negacionistas de (el presidente Javier) Milei --en cuanto a la problemática-- multiplican las violencias". En ese sentido, María José Zochi, referenta de Mumalá Santa Fe, sostuvo que "ante el negacionismo del Estado Nacional, el ajuste desmedido y el empobrecimiento brutal que afecta principalmente a mujeres y disidencias, y que impacta en forma exponencial en el aumento de las violencias, es necesario que los estados provinciales, en todos sus niveles, implementen urgentes medidas y políticas públicas para prevenir las violencias". 

Entre los datos de la provincia, se contabilizaron 8 femicidios cometidos desde el inicio del año, a los que se suman 7 casos de mujeres víctimas de la violencia en contextos de criminalidad organizada. En tanto, hay otras 5 muertes violentas que están en investigación, y un caso de suicidio femicida, según indica el informe. "Es imprescindible el abordaje desde el Estado provincial", instaron sobre el reclamo que vienen haciendo con diferentes actividades.

Por su parte, Gabriela Sosa, directora Ejecutiva de la Mesa Federal Mumalá consideró una necesidad "recuperar los programas que contribuyen a sensibilizar y generar conciencia sobre la violencia por motivos de género". Y agregó: "Los contextos de crisis económica, desempleo y hambre recrudecen las violencias cotidianas, llevándolas a la máxima expresión, que es el femicidio o transtravesticidio".

Además, plantearon que teniendo en cuenta las cifras del observatorio, "la violencia por motivos de género sigue instalada y se perpetúa en nuestra sociedad". Son 125 los femicidios que registraron desde el 1 de enero al 30 de julio; y en el mismo período fueron 311 los intentos de femicidio. "Ambas cifras evidencian que mujeres y disidencias necesitan urgentes y efectivas respuestas por parte del Estado y no la negación de una problemática que nos arrebata la vida cada 41 horas". 

En ese contexto, el informe indica, entre otros datos, que el 52% de los femicidas era pareja o expareja de las víctimas; que el 35% de éstas convivía con su agresor; y que el 13% había hecho denuncia por violencias. "En la crueldad de estos datos, también tenemos que denunciar que 109 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madre (en el país), y son víctimas colaterales de los femicidios", lamentaron sobre lo que ocurrió como consecuencia del caso del 45% de las víctimas.

Por todo, instaron "al gobierno nacional al cumplimiento de la normativa nacional e internacional para el abordaje y la contención de estas situaciones que se denuncian. Es urgente la toma de medidas".