Se acabó la ilusión de la Selección olímpica de Javier Mascherano. Un gol tempranero de Jean-Philippe Mateta resultó suficiente para que Francia se impusiera 1-0 y lograra su boleto para las semifinales, en un partido muy intenso en el que Argentina no tuvo fortuna y lo terminó pagando con la eliminación. Para los locales, el premio es jugar en las semifinales ante Egipto, que eliminó por penales a Paraguay.

El estadio de Burdeos vivió algo más que un duelo por los cuartos de final de unos Juegos Olímpicos. Las heridas abiertas entre franceses y argentinos quedaron expuestas desde antes del inicio, incluso con la mención de las alineaciones media hora antes del arranque del partido. Por eso, no sorprendieron los silbidos al himno argentino ni un clima de clásico durante el desarrollo del encuentro.

El problema es que el equipo de Mascherano pareció sentir ese impacto y le costó afirmarse unos 20 minutos en la cancha. Para ese momento, Francia ya ganaba con un anticipo de cabeza de Mateta sobre Otamendi en el primer palo y amenzaba con cada corrida ante un rival distraído y desconcentrado. Por eso, Rulli tuvo más trabajo en ese rato que lo que había sufrido en el resto del torneo.

Sin embargo, la Sub 23 albiceleste superó el mal trance y comenzó a dominar cuando promediaba la primera etapa, a partir de la mayor injerencia de Equi Fernández y Almada en el armado de las maniobras. Precisamente el todavía jugador de Boca estuvo a punto de igualar con un zurdazo de afuera que el arquero Restes desvió al corner. El mejor juego argentino no tuvo premio, pese a un cabezazo de Otamendi y un par de buenas acciones de Almada. Para colmo, Simeone dilapidó la mejor acción colectiva de la primera etapa, con un cabezazo alto desde adentro del área chica.

El segundo tiempo se planteó con una Argentina protagonista y una Francia más abroquelada en su campo, a la espera de alguna contra para liquidar el resultado. Pero a pesar de tener más la pelota, el equipo de Mascherano inquietó poco a Restes, que siempre respondió con solvencia. 

Con el correr de los minutos, Argentina puso toda su artillería, con las entradas de Beltrán, Echeverri y Gondou, pero tampoco encontró tanta profundidad, más allá de una chance muy clara del goleador de Argentinos que no pudo aprovechar. Con la Selección jugada en ataque, Francia llegó al segundo gol por intermedio de Olisé, pero gracias al VAR, que detectó una falta previa sobre Equi Fernández, el juego siguió 1-0. 

Hasta el último segundo, el equipo albiceleste fue en busca del empate, pero entre la falta de puntería y la falta de fortuna, no pudo conseguirlo. "El fútbol tiene estas cosas. A veces haces todo para ganarlo e hicimos mérito para no perderlo y sin embargo nos quedamos con las manos vacías", se lamentó Mascherano. Del otro lado, los franceses lo festejaron como si fuera la medalla, incluso con una cargada de más, lo que generó un cruce caliente con algunos jugadores argentinos. "No tomamos este partido como una revancha. La final del Mundial fue con otros equipos. Pido perdón por el disturbio. No es lo que quería y no pude controlarlo", se disculpó el entrenador francés, Thierry Henry, que antes del lío se había dado un afectuoso abrazo con su excompañero Mascherano.