La exministra de Economía, Felisa Miceli, explicó por la 750 los tres factores claves que se deben tener en cuenta para explicar el desplome de las bolsas y mercados financieros de todo el mundo y cómo esto podría impactar en Argentina.
El primer impacto del viernes y el lunes negro empezó en Japón, donde el Nikkei 225, que ya había caído un 5,8% el viernes, se desplomó un 12,4% el lunes, batiendo su récord de pérdidas desde octubre de 1987. Para la economista, hay tres factores claves que explican este fenómeno. El primero tiene que ver con la suba de tasas de interés en Japón, lo que encareció las deudas que tenían muchas empresas por el pago de los intereses.
“Muchos que tomaron préstamos vieron la dificultad de pagar un mayor monto de intereses. Y vendieron gran parte de lo que habían colocado en la bolsa para poder pagar esos intereses”, explicó.
Esto, dijo la exministra, significó ventas masivas de fondos especulativos que se habían colocado en dólares. “Y pudieron vender sus tenencias, provocando una baja muy importante”, aseguró.
Al mismo tiempo, sostuvo, en Estados Unidos se dio a conocer el estado de situación en materia productiva, con la suba del desempleo y una perspectiva más baja sobre la creación de puestos de trabajo de lo previsto. “No me parece una causa tan relevante. Sin embargo, es una causa más que colabora con esta situación”, explicó sobre el mercado laboral de los Estados Unidos, donde el desempleo creció al 4,3 %.
Finalmente, como tercer factor, sostuvo que está la disputa en Medio Oriente y la guerra entre Israel y Palestina. “Eso influye en las perspectivas de imposibilidad de abastecimiento de petróleo al mundo”, dijo.
“Hay varias causas que se juntan para dar este resultado. Hoy ya rebotó la bolsa de los países del Sudeste Asiático. Europa estaba cayendo más levemente. Hay que ver que pasa con Nueva York, que es la que tiene más incidencia en nuestro país”, afirmó.
De todos modos, el impacto no sería muy grande. “A nosotros nos interesa que acá en Argentina por más malestar bursátil que haya, la situación sigue igual de mala. Con una recesión que se agudiza y generando un impacto sobre el empleo que se está viendo en la suba de la pobreza y la indigencia”.
Pero, esto sí, podría tener un impacto en los planes del Gobierno, sobre todo con la dolarización. Así lo explicó Miceli, quien comenzó señalando que “estamos lejos de una dolarización” en Argentina.
“Hay una negociación con el Fondo. Hay vencimientos por delante. Tenemos muchos pasos que dar antes de que se pueda pensar en una estabilización que pueda llevar a una dolarización”, afirmó.
Y dijo: “Sabemos que se están llevando el oro para embargarlo para hacer un pase con los bancos para que nos den dólares para tenerlos guardados y sepan que son para pagar los vencimientos de enero. Todo esto puede saltar por los aires con estos cambios en el mercado mundial, donde los fondos van y vienen por todos lados”.