Habrá que decirlo otra vez: Manuel Moretti dejó grabada para la posteridad una frase con la que es difícil no identificarse. "Le di mi vida a las canciones, y no me arrepiento", canta en "Melancolía", y el coro que atruena el Luna Park demuestra que son miles las almas que suscriben. Esas mágicas canciones, el disco que Estelares acaba de subir a plataformas, sirve como prueba de esa identificación y también del notable resultado que produjo esa decisión vital, un formidable compendio de canciones de todas las épocas que certifica el valor de la banda platense en el largo devenir del rock argentino.

El 1º de diciembre de 2023, la orquesta que encabezan Moretti, el guitarrista Víctor Bertamoni y el bajista Pablo Silvera, ampliada y enriquecida por Javier Miranda (batería), Eduardo Minervino (teclados),  Guillermo Harrington y Martín "Tucán" Bosa (guitarra y coros) se dio un gusto grande. Es que Estelares ya experimentó el calor popular en varias salas distinguidas, pero el templo del Bajo siempre tiene un sabor especial. Y por supuesto, la canción que abrió aquella fiesta y este registro no podía ser otra que "De la Hoya", inicio de una poderosa cabalgata por todas las épocas del grupo.

¿Cómo no rendirse ante la sintonía fina de Manuel y sus compañeros para la melodía inolvidable? ¿Cómo evitar el lugar común de señalar que Estelares gana por nocaut? De allí al épico cierre de "Ardimos", también de aquel emblemático disco de 2003, el grupo totaliza 26 canciones que provocan un coro inmediato, hasta el asombro de cuántas cosas ya ha dejado impresas en la memoria y el corazón. En vivo en el Luna Park -que puede ser disfrutado a pleno en el apartado "Especiales de rock nacional" de la plataforma Flow- entrega vibrantes versiones de páginas perfectas como "Un show", "Cristal", "Alas rotas", "Un día perfecto" (y el Luna se viene abajo), "Aire", "Aleluya" o "Las trémulas canciones", incluso el rescate de la lejana "20 de noviembre", del debut de 1996.

Víctor Bertamoni (Imagen: Santiago García Díaz)

Manu canta y vive letras a veces en carne viva. Torio Bertamoni sigue demostrando ser un guitarrista sutil y exquisito. Pali y Miranda son una pared que nunca pierde el groove. Los músicos invitados multiplican los matices. Y en el recorrido Estelares convida a algunos amigos para dos versiones con una nota distintiva. Juliana Gattas se trenza con Moretti en un dueto ideal para "Ella dijo", clásico de Sistema Nervioso Central que va abriendo las puertas para la andanada final. Pero el otro "feat" brilla más aún, cuando Manu, Cucuza Castiello y Mariano Fernández Bussy hacen del vals "Autobuses", gran momento de Una temporada en el amor, uno de los momentos cumbres de este registro.

Es curioso: los discos en vivo a menudo son solo un recuerdo para atesorar ("Y como un souvenir, me convierto en su souvenir..."), que no siempre consiguen recrear la potencia del momento. Y aunque eso es imposible, nada puede igualar la intensidad y la pasión del hecho en vivo, hay algo en Esas mágicas canciones que logra erizar la piel y desatar otra vez la garganta que no puede, no quiere negarse al rito de adueñarse también de un cacho de vida encerrado en un puñado de minutos. Les damos la vida. Y no, no nos arrepentimos.