La mañana del sábado 17 de junio de 1972, un periodista de The Washington Post de 29 años, que había ingresado al diario nueve meses antes, fue despertado de urgencia por el llamado de un editor. Bob Woodward debía ocuparse del arresto de cinco hombres detenidos a las dos y media de la madrugada en el edificio Watergate de Washington, donde funcionaba el Comité Nacional del Partido Demócata. Empezó a hacer llamadas; todas sus fuentes se mostraronPostCarl Bernstein