El socio de Independiente Juan Lezcano denunció que la dirigencia del club le prohibió la entrada al estadio Libertadores de América por ser opositor. El sábado pasado, durante el partido entre el "Rojo" y San Lorenzo, el hincha fue escoltado por la policía fuera del estadio y, más tarde, le dictaron el derecho de admisión por dos años. 

Además, Lezcano apuntó contra la actual dirigencia, en manos del exintendente de Lanús y actual jefe de Gabinete porteño, Néstor Grindetti: "En Independiente se vive un clima de hermetismo con todo lo que sucede, es como una familia cerrada. Cuando rompés con eso, a esta dirigencia no le gusta", denunció, en diálogo con la 750.

La situación entre Lezcano y la policía se dio cerca de los cinco minutos de iniciado el segundo tiempo, cuando escuchó golpear la puerta del palco y vio ingresar a los uniformados, que preguntaban por él. "No podés estar acá", le dijeron. 

Lezcano fue retirado del estadio y trasladado durante una cuadra, sin recibir explicaciones. "No sabía lo que me iba a pasar, si me iban a llevar a dos cuadras a molerme a palos, si me iban a llevar a la comisaría para amedrentarme", relató.

El hincha y militante de la agrupación partidaria La Pedro Iso está convencido de que sus críticas contra la dirigencia en la red social X y sus actividades políticas en la oposición están detrás de la prohibición al ingreso. 

"En estos últimos dos años ha habido una desmejoría después de la salida de Hugo Moyano, cuando pensábamos que se terminaba una época oscura. Hoy te encontrás tierra arrasada en todo sentido", advirtió con Branca de vuelta.

Lezcano cuestionó además los vínculos directos entre la dirigencia y la política, una situación que se replica cada vez más en los distintos clubes sociales y deportivos. "Grindetti quedó porque en realidad el principal candidato era Fabián Doman y el segundo vicepresidente Juan Marconi", recordó.

"También está (Cristian) Ritondo y Carlos Montaña, viceministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires", agregó.

La diferencia de colores políticos no parece ser un problema cuando de gestionar un club se trata. Para Lezcano, la dirigencia y las terminales políticas que rondan en Independiente tienen un sólo objetivo: "Están tratando de cansar a la gente, hartarla y haciéndole creer que la única salida es privatizar al club", concluyó.