Siguiendo una lógica arbitraria –todo recorrido lógico lo es- recordaré qué dice Ludwing Wittgenstein respecto a los pensamientos: La figura lógica de los hechos es el pensamiento. 

Ahora aclararemos qué quiere decir patrón –figura-, y qué podemos comprender por la lógica que hace equivalente al pensamiento con lo que deberemos explicar para que aquello que figuramos como "hechos" represente tanto a la lógica como a la existencia de los pensamientos. 

Pero primero digamos lo que el propio Wittgenstein dice en el prólogo de su Tractatus, justamente porque allí se refiere a los pensamientos y su expresión: "Cabría acaso resumir el sentido entero del libro en estas palabras: lo que siquiera puede ser dicho, puede ser dicho claramente; y de lo que no se puede departir hay que callar. El libro quiere, pues, trazar un límite al pensar o, más bien, no al pensar, sino a la expresión de los pensamientos. [Recordemos que para el derecho o la filosofía de la jurisprudencia las ideas no existen, solo existen sus expresiones]). Así, pues, el límite solo podrá ser trazado en el lenguaje, y lo que reside más allá del límite será simplemente absurdo". 

Es, creo entrever, como la tarea de cualquier naturalista que encuentra allí, en la naturaleza, su obrar: la igualdad que nos permite finalmente concluir que una sociedad tiene un significado social, objetivamente individual y anónimamente plural, como la naturaleza persiste, está viva, vive, cuando solo sabemos que para comprender su esencia debemos recurrir a la figura de un hacedor que simbióticamente hace con su comportamiento aquello que se refiere a planos complementarios, ya que solo puede ser comprendido si lo podemos comparar con otro que figure el argumento de la cadena de significados o hechos que representan con su simétrica coexistencia, como un naturalista encuentra en la naturaleza aquello que es su principio y su finalidad. El hecho que demuestra que la vida sería un absoluto si no pudiéramos describir y definir aquello que hace que exista un ser vivo con los matices que cualifican su singularidad. Es por eso que Wittgenstein dice que la figura de los hechos o los hechos que representan a la figura lógica de los hechos son un modelo de la realidad, porque aun cuando el estado de las cosas no representen al mundo, sus interrelaciones nos permiten comprender la totalidad de los hechos que sí le pertenecen a la definición de lo que significa que podamos decir que existe el mundo. 

El estado de las cosas es dable, efectivo, hecho (las cosas están hechas; no hacemos el amor, el amor está hecho), ya que primero decidimos y recién después deducimos: es el acto legal o ilegal de un comportamiento que se corresponde con la esencia del derecho y por lo tanto con aquello que nos hace humanos: decidimos sobre un estado de cosas o casos: hechos, figuras, que aunque no posean la formalidad de un método cronológico, lineal, carente de las etapas que la antropología considera necesarias para la historia que el ser humano obra con el propósito de encontrarles un final, sí, en cambio, coinciden con otra cualidad de su comportamiento, porque anticipan y anteceden a cualquier argumento que el lenguaje de la lógica y sus inferidos razonamientos expresan sin latencia, sin delay, sin ingravidez, sin un espacio abierto adentro del espacio y el tiempo, y sí con los argumentos que nos llevan a comprender por qué el caso es lo que es y no otra cosa sino el estado mismo de las cosas: el darse efectivas cuando emprendemos juicio posterior. Performativa como los actos de un enunciado que conforma realidad después de demostrar, ver, (Insigh), entrever, en sus figuras, la paradójica actitud de quienes sin reconocer sus significados los actúan, los representan, aunque su performance no cambie la realidad sino solo la señale, y demuestre que los actos de habla que generan las acciones de sus palabras serán las improvisaciones de su performance, aun cuando finalmente solo sepamos decir nada sé.

Repitamos, ahora sí, qué son los pensamientos para Wittgenstein: La figura lógica de los hechos es el pensamiento. ¿Recuerdan? Entendemos por lógica una cadena de razonamientos que se relacionan simétricamente. Cada uno de nuestros razonamientos o pensamientos tiene relación directa con el que lo sucede o antecede, formando de esa manera un todo compatible y congruente. 

¿Qué es figura, entonces, a qué le llama figura Wittgenstein?: La realidad total, nos dice, es el mundo, y comprendemos que esto implica aceptar que nos hacemos figuras de los hechos, ya que la totalidad de los hechos es el mundo y no las cosas. La figura representa el estado de cosas en el espacio lógico, es decir, el darse o no darse efectivos de curso de cosas. La figura es un modelo de la realidad. Repitamos esta última frase del párrafo anterior: el darse o no darse efectivos DE curso de cosas. 

No dice en el estado de cosas, sino utiliza la parte DE para decir que el espacio lógico es equivalente a la preposición que carece de sujeto y nombra a las cosas en el DE-CURSO DE [las] COSAS. Sócrates utilizó la misma figura para decir lo que en el párrafo anterior concluimos sin repetir su popularmente equivocada expresión, ya que nunca dijo Solo sé que no sé nada, sino Solo sé que nada sé: es la misma afirmación que hiciera Descartes apoyándose en la duda, ya que si dudaba de sí mismo era incomparable con Dios, y por lo tanto sus meditaciones metafísicas podían pertenecer a su/la historia, podían ser pensadas, y eso le permitió concluir Pienso "," (Coma,) existo, así, mediado por una pausa, no con una confirmación; quiero decir, la oración continúa, como continúa la oración con la preposición DE para Wittgenstein, esto es, con el mismo razonamiento que lo lleva a Sócrates a decir que solo –la duda de Descartes- sé que nada sé: en estas tres frases coinciden tanto Descartes como Sócrates y Wittgenstein, porque les permiten decir que serán posibles o verdaderas sus proposiciones en tanto sean efectivas dentro del curso de sus respectivas cosas cursadas. 

Si Wittgenstein utiliza la preposición "DE" para la proposición que hace efectiva, real, cierta o verdadero el argumento que debe ser puesto a prueba: La figura representa el estado de cosas en el espacio lógico, lo hace porque el hecho de que los objetos se correspondan en la figura con los elementos de la misma, interrelacionándose, comportándose las cosas como los elementos de la figura, implica, ipso facto, que la figura es ella misma un hecho.

Después Wittgenstein dirá respecto a la figura algo muy caro a la literatura: Esta interrelación de los elementos de la figura es su estructura, y su posibilidad la forma de figuración; o, lo que diríamos hablando de literatura: la estructura es la forma. Ahora podemos comprender por qué la figura lógica de los hechos es el pensamiento: si pienso en un invento como la rueda diré, para explicarlo, que al ver caer de una pendiente una piedra interrelaciono -debido a ese movimiento circular constante- mis pensamientos hasta figurar algo que con un vocabulario inexperto llamaré carreta, y con ella la figura de un círculo que ponga a prueba ese razonamiento con algo que llamaré rueda. 

¿No habían hecho esto los primeros Homo Sapiens, cuando en el hueso de un animal vieron la posibilidad de construir un hacha? Lo que demuestran estos dos ejemplos es la utilización instrumental de nuestros pensamientos, porque, como expresara John Dewey a finales del siglo XIX: ¿Qué diferencia puede haber entre la función de nuestras manos y la función de nuestra mente?