A un año de la muerte del fotoperiodista y militante Facundo Molares, su familia conmemorará su vida y compromiso en un acto el próximo sábado 10 de agosto, desde las 10 horas en la Plazoleta Sur del Obelisco (Avenida 9 de Julio y Avenida Corrientes, Ciudad de Buenos Aires).
Su padre, Hugo Molares, habló de sus sospechas alrededor del operativo de seguridad, la metodología de la Policía de la Ciudad y el respaldo a los efectivos del entonces jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta y su ministro de Seguridad, Eugenio Burzaco.
"Esta gente actuó como actúa un jefe mafioso, Larreta en este caso, (Patricia) Bullrich, Burzaco, actúan como jefes mafiosos, tienen una fuerza de choque y cuando hay una persona que molesta mandan a los matones, uniformados o no, para ejecutar las órdenes", sostuvo Molares en la 750.
La manifestación del jueves 10 de agosto de 2023 de la que participó Facundo Molares estaba convocada por las organizaciones MTR, Votamos Luchar y Rebelión Popular a los pies del Obelisco. La consigna de la asamblea popular era contra "la farsa electoral", en referencia a las elecciones primarias que se celebraron tres días después. En las PASO se dirimía la interna de Juntos por el Cambio entre Larreta y Bullrich, en medio de un clima de escalada de la violencia: tan sólo dos días atrás habían asesinado a Morena Domínguez en Lanús, otro distrito gobernado entonces por el PRO.
Molares se había separado un poco de sus compañeros luego de hablar ante los asistentes, y minutos más tarde fue abalanzado por las fuerzas de seguridad. Según contó su padre, una de las particularidades del hecho que aún llama la atención es la decisión de reprimir a ese pequeño grupo de militantes que estaba separado de la gran manifestación y la "metodología" que usó la policía para reducirlos. "Son metodologías de las fuerzas represivas de Estados Unidos e Israel", aseguró el padre del fotoperiodista.
Por la cercanía con el hecho y las imágenes que se viralizaron en ese momento, el caso recordó al de George Floyd, el hombre afroamericano asesinado en Estados Unidos por el oficial Derek Chauvin, quien presionó durante ocho minutos el cuello de la víctima con su rodilla hasta matarlo. En el caso de Molares, en las imágenes que documentaron el hecho se vio cómo otro colega fotoperiodista gritaba, ante la reducción del militante: "¡Está morado, dalo vuelta ya, se descompensa, tiene un infarto!”.
Hugo Molares consideró posible que las fuerzas de seguridad conocieran a su hijo. "No tengo dudas de que estaba individualizado, no sólo por sus actividades de militancia sino por su actividad en Bolivia, su arresto, las torturas que sufrió, las intervenciones del gobierno anterior y la repercusión mediática que tuvo", explicó con Gustavo Campana.
Por último, concluyó: "Facundo estaba ahí porque realmente era una consecuencia de toda su vida. Desde los 14 años militaba y recorrió todas las instancias de compromiso y de lucha y jamás esquivó la responsabilidad ni el riesgo".
Con respecto a la causa, la querella, integrada por el Movimiento Rebelión Popular Facundo Molares y La Gremial de Abogados y Abogadas, decidió desistir en julio y denunciaron maniobras de encubrimiento desde la fiscalía y el poder judicial.
Seguí leyendo: