La cifra de palestinos muertos en Gaza roza los 40 mil a la espera del recuento final de víctimas del ataque contra una escuela el sábado en la capital, Ciudad de Gaza, en el que perdieron la vida unas 100 personas según Hamas. Mientras, en la sureña Jan Yunis Israel redujo una vez más el tamaño de la zona humanitaria en la que se hacinan miles de personas. El primer ministro, Benjamin Netanyahu, sigue insistiendo en continuar con la guerra "hasta la victoria", a pesar de las críticas internas y las presiones renovadas para alcanzar un alto el fuego.

Las autoridades gazatíes informaron que una cuarta parte de los casi 40 mil palestinos fallecidos son jóvenes de entre 18 y 29 años. Con motivo del Día Internacional de la Juventud que se celebra este lunes, las autoridades de la Franja denunciaron que el 24 por ciento de los fallecidos en los 10 meses de guerra eran jóvenes de entre 18 y 29 años, el 26 por ciento hombres y el 22 por ciento mujeres, recogió la agencia palestina de noticias Wafa.

Sigue el asedio a Jan Yunis

A lo largo del domingo continuaron los ataques contra toda la Franja, dejando al menos 22 muertos. Los ataques impactaron especialmente sobre la castigada ciudad de Jan Yunis, en el sur, donde el Ejército israelí ordenó evacuar más partes de la designada zona humanitaria en el norte de la localidad, reduciendo todavía más el espacio seguro del enclave dos días después de lanzar una nueva ofensiva terrestre en la localidad.

En la zona humanitaria de Mawasi, al oeste de la ciudad, cada vez más personas se hacinan en un enjambre de tiendas de campaña en la playa, con pobres condiciones humanitarias, a la luz de las nuevas órdenes de evacuación. "El área en la que te encontrás se considera una zona de combate peligrosa", dijo en la red social X el vocero militar israelí, Avichay Adraee, cuando llamó a evacuar el barrio de Al Jalaa.

Jan Yunis fue históricamente el bastión de las milicias palestinas en Gaza y, en los últimos días, el Ejército volvió a ordenar la evacuación de múltiples barrios: Al Salqa, Al Qarara, Bani Suhaila, Abasan, Khirbet Khuza'a, todos en el este y noreste de la ciudad. El 4 de agosto Israel también ordenó la evacuación de barrios del sudeste de la ciudad, después de una incursión a finales de julio que dejó unos 300 muertos.

Malestar con Netanyahu

Tanto en Jan Yunis como en Ciudad de Gaza el Ejército lleva a cabo ofensivas sobre territorios en los que ya había dado por neutralizadas a las milicias palestinas, algo que desata cada vez más críticas entre la sociedad israelí, incluso entre los círculos militares, de acuerdo a un artículo del diario local Yedioth Ahronoth. "El objetivo es la victoria", insistió este domingo Benjamin Netanyahu, quien planteó que los soldados israelíes "están destruyendo a Hamas de manera sistemática con el objetivo de demoler las capacidades militares y gubernamentales, además de liberar a los rehenes".

Los soldados entrevistados por Yedioth Ahronoth critican que el gobierno israelí no fijó un "objetivo a largo plazo" sobre la guerra en Gaza y que la situación actual es de "estancamiento". Por su parte un comunicado castrense aseguró este domingo que las fuerzas armadas atacaron en las últimas 24 horas unos 30 objetivos en la Franja de Gaza, entre milicianos, almacenes de armamento y lugares de lanzamiento de cohetes, sin hacer mención al bombardeo contra Al Tabaín.

En Ciudad de Gaza, en el norte de la Franja, los servicios de emergencia seguían el domingo activos en la escuela bombardeada la víspera, donde murieron al menos 93 personas, entre ellas numerosos mujeres y niños, según la Defensa Civil del territorio. "Nos llevará dos días más identificar a los cuerpos despedazados", indicó un portavoz de esa administración, Mahmud Basal. El Ejército israelí afirmó que ese establecimiento servía de base a Hamas y la Yihad Islámica para realizar ataques contra sus soldados e indicó que en esa operación mató a "al menos 19 terroristas".

La Liga Árabe, Irak, Irán, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Araba Saudita, Líbano, Jordania, Francia y la Unión Europea condenaron el bombardeo. Este domingo se sumó el gobierno de Portugal, que consideró "intolerable" el ataque a escuelas en Gaza y apeló a que se respete el derecho humanitario y se produzca un alto el fuego "inmediato e incondicional". En la región los gobiernos de Colombia, Perú y Venezuela condenaron el ataque que causó una "espeluznante masacre".

Hamas busca avanzar con el plan de Biden

Hamas exigió el domingo aplicar el plan de tregua en Gaza presentado por el presidente estadounidense Joe Biden "en lugar de realizar más negociaciones". Las conversaciones mediadas por EE.UU., Egipto y Qatar no arrojaron ningún resultado hasta el momento. Israel aceptó el viernes reanudarlas a partir del 15 de agosto. Biden presentó el 31 de mayo un plan, que atribuyó a Israel, que consta de tres fases. La primera prevé una tregua de seis semanas y una retirada israelí de las zonas densamente pobladas de Gaza, así como un canje de rehenes retenidos en el territorio palestino por presos palestinos detenidos en Israel.

En su comunicado del domingo, Hamas "pide a los mediadores que presenten una hoja de ruta para implementar" ese plan, "basado en la visión de Biden y en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU". En el poder en la Franja de Gaza desde 2007, Hamas urgió a los mediadores a "forzar al ocupante (israelí) a aplicar ese plan, en lugar de llevar a cabo más negociaciones o presentar nuevas propuestas que sirvan de cobertura a la agresión de la ocupación".

El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, aludió este domingo a posibles sanciones después de acusar a un ministro israelí de extrema derecha de incitar a crímenes de guerra en Gaza. El ministro de Seguridad Nacional de Israel, el Itamar Ben Gvir, llamó a cortar el flujo de combustible y ayuda a los civiles palestinos. Borrell también repudió los dichos del ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, quien había dicho que el hambre de los niños en Gaza sería "justificada y moral".

La guerra estalló el 7 de octubre cuando milicianos islamistas mataron a 1.198 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel, según un balance basado en datos oficiales israelíes. También tomaron 251 rehenes, de los cuales 111 siguen secuestrados en Gaza aunque 39 de ellos habrían muerto, según el Ejército israelí. La ofensiva israelí en Gaza deja hasta ahora 39.790 muertos, según el ministerio de Salud del gobierno de Hamas, que no detalla el número de civiles y combatientes muertos.