La diputada nacional por Unión por la Patria Mónica Macha analizó por la 750 la denuncia contra el expresidente Alberto Fernández por presunta violencia de género contra su expareja Fabiola Yáñez. Dijo que si bien hay algo en la situación que genera la idea de una escena repetida, aquella de hombres violentos que tienen un discurso hacia afuera y otro puertas adentro, esta vez hay un debate motorizado por el feminismo que marcan en la situación un punto de quiebre.
“La verdad es que desde que conocimos las primeras noticias, las primeras cuestiones vinculadas a lo que se decide filtrar, fue un shock y la sensación de ‘nos pasó otra vez’. Tal vez es la primera vez que con un presidente pasa algo así. Pero a veces pasa con compañeros o personas que son referencia en algún tema, esto de tener una fachada en lo social y otra puertas adentro en el contexto de las parejas”, comenzó.
Pero, inmediatamente, explicó que no fue un “otra vez” a secas. “El martes tuvimos una reunión de bloque. Ahí surgió este tema. Yo lo veo como rasgo interesante, como un proceso distinto. No esquivarle al tema. Tomarlo como un tema fuerte. Pensar qué posición tomamos. Y sacar un comunicado con 56 firmas”.
Es decir, lo que marca la diferencia entre una situación de violencia que trae reminiscencias de una violencia repetida, es la respuesta del arco político: “Me parece que en ese punto hay un avance en términos de poder pensar las acciones políticas donde intervenga una perspectiva feminista. Es una discusión que está cada vez más presente”.
Pero para Macha hay más. Y está el hecho de que la, para ella, si esta denuncia por presunta violencia de género salió a la luz, es porque el feminismo tuvo una lucha activa contra este tipo de violencias en los últimos años. Cabe recordar que no pasaron ni 10 años de la primera marcha en Argentina por el colectivo de Ni Una Menos.
“Yo creo que si esto se hizo público fue por la lucha feminista. Yo creo que la posibilidad que tenemos de estar discutiéndolo es consecuencia de la lucha feminista. Y lo que sucede desde el oficialismo es que pasa esto y la culpa es del feminismo. Es una incoherencia”, cuestionó.
Y añadió: “Es un desafío pensar cómo podemos volver a pensar y transmitir este pensamiento desde un lugar más saludable, más humano. Porque es gravísimo que pase en el contexto de la pareja presidencial. Es angustiante pensar que si Fabiola estuvo en esta situación qué le queda a las demás mujeres en Argentina”.
“Si antes estábamos con un armado (de políticas feministas) que iba llegando de a poco, porque es un problema muy complejo, ahora sin esas políticas estamos en un contexto más complejo. Sin embargo, el oficialismo dice que por esto no hay políticas. Y debería decir que por esto hacen falta políticas”, finalizó.