“Creo que el tango está, por suerte, en una evolución permanente y el Festival tiene que reflejar esa evolución estética”, considera Gustavo Mozzi, recientemente confirmado como nuevo director artístico de Tango BA en reemplazo de la bailarina Natacha Poberaj (que integra, igualmente, la mesa de programación del encuentro). Las declaraciones de Mozzi a Página/12 abren las esperanzas de que finalmente el Festival ofrezca un espacio amplio a la variedad de expresiones que atraviesan el género desde hace algunos años. La prueba concreta se verá a partir de este miércoles 14, cuando dé comienzo el Festival y Mundial de Tango, que se extenderá hasta el 27 de agosto, con la consabida competencia internacional de danza y más de 500 actividades de distinto tipo vinculadas a la música ciudadana. Aunque la programación (disponible en breve en la flamante web https://tangoba.org/) no carece de los clásicos de siempre, también reaparecen nombres de la renovación de este siglo que hace rato no figuraban en la grilla de conciertos. “Trabajamos mucho con la mesa de programación, que estuvo integrada por Pablo Agri, Pablo Motta y Natacha Poberaj, para reflejar de la mejor manera las diferentes tendencias de una escena que es vigorosa y muy diversa”, confía Mozzi.
Después de varios años de gestión del académico Gabriel Soria y de la bailarina Natacha Poberaj, este año estará al frente del encuentro Mozzi, formado originalmente como músico antes de involucrarse en la gestión pública. As, aparecerán eventos como la primera cumbre de orquestas escuela de tango y la idea de ciclos temáticos, como el “Tinta Fresca”, que nucleará a compositores y grupos actuales como Agustín Guerrero, Astillero, la Orquesta Cuerdas del Plata, Juan Pablo Navarro, Diego Schissi y la Orquesta Típica Di Pasquale. “Son todos compositores con un lenguaje personal, maduro y al mismo tiempo actual y novedoso”, plantea Mozzi.
“También me pareció importante esta edición integrar de la mejor manera posible música y danza, por eso en el Polo Milonguero, que va a desarrollarse en el Cultural San Martín, donde van a estar algunos de los bailarines y coreógrafos más notables de este momento, pero también una cumbre de DJs y una cumbre de orquestas típicas bailables que van a ser el broche de oro, el cierre de cada una de esas jornadas”, cuenta.
Uno de los rasgos salientes de esta edición es la incorporación decidida de distintos espacios de la cultura porteña, otrora refractarios a involucrarse en eventos de este tipo. La presencia de Mozzi –quien coordina la Dirección de Música del gobierno de la Ciudad- “aceitó” los canales de comunicación entre distintas áreas, confiaron por lo bajo algunos funcionarios porteños, lo que allanó la apertura de Tango BA a otros espacios oficiales. Así, a la trinchera de la Usina del Arte se sumará el circuito de teatros oficiales de la ciudad con el San Martín, el Teatro de la Rivera y el Presidente Alvear, el Centro Cultural San Martín, el Recoleta, varios museos y la perla de la Ciudad: el propio Teatro Colón.
Además de otras sedes habituales, como el Teatro 25 de Mayo, esta vez se pliegan al evento muchos estaños del circuito de bares notables. En la previa, las autoridades celebran estas incorporaciones y las atribuyen a “una administración eficiente”, además de destacar el récord de inscriptos en las competencias de baile. Y aunque alguna voces del mundillo de los bailarines se quejaron por las jornadas clasificatorias (son lunes y martes, y también será un martes la final), hasta el momento la bronca no pasó a mayores. Habrá que ver cómo funciona la concreción de la final, que dejará la icónica foto de la noche del sábado con el Obelisco de fondo, donde la había llevado la gestión de Poberaj, para trasladarse al marco del Movistar Arena.
A lo largo del festival actuarán, entre otros artistas notables, Susana Rinaldi, Rodolfo Mederos, Sandra Mihanovich, Néstor Marconi, el Quinteto Revolucionario, José “Pepe” Colángelo, Juan Carlos Baglietto, Franco Luciani, Amelita Baltar, Víctor Lavallén, la Orquesta del Plata, Noelia Moncada, Sexteto Mayor, La Juan D'Arienzo, Raúl Lavié, Carlos Rivarola, Adriana Varela, Esteban Morgado, Orquesta del Tango de la Ciudad, Johana Copes, Nahuel Pennisi, Julia Zenko, El Arranque, Eduardo Arquimbau, Color Tango, Astillero, Vanina Bilous, Walter Ríos y Natalia Hills.
La apertura del miércoles 14 a las 20, en la Usina del Arte, busca cruzar generaciones y estilos, y reunirá a José Colángelo, Néstor Marconi y Víctor Lavallén con los jóvenes intérpretes de la Orquesta Escuela de Tango, y a Juan Carlos Baglietto y Noelia Moncada con la Orquesta El Arranque. Además, bailarán para la ocasión los últimos campeones de tango escenario Julian Sánchez y Bruna Estellita. Y aunque habrá actividades hasta el 27, el cierre formal del Festival será el domingo 25 de agosto en el Teatro Colón, con una gala de la Orquesta del Tango de Buenos Aires, dedicada exclusivamente a la obra de su director, el bandoneonista Néstor Marconi.
“El Festival de Tango es un evento al que yo quiero mucho, por compromiso con el género, pero también porque participé como programador en las primeras ediciones, allá por los 2000”, cuenta Mozzi a Página/12. “Luego me tocó la responsabilidad de ocuparme de la dirección artística durante varios años y ahora, por decisión de la Dirección de Festivales, la idea es articular con la Dirección de Música, de la cual estoy a cargo. Por lo tanto, vuelvo a estar al frente de los contenidos, lo que es un desafío maravilloso”.