La viabilidad de cumplir los objetivos del Acuerdo de París es "cada vez más desafiante" debido, entre otros, a limitaciones institucionales; incluso con una descarbonización exprés, el mundo solo tiene entre un 5 y un 50 % de posibilidades de mantener el pico de calentamiento por debajo de 1,6 grados.

Esta es una de las conclusiones de un estudio dirigido por el Centro para la Sostenibilidad Global (CGS) de la Universidad de Maryland. Publicado en la revista Nature Climate Change, subraya los desafíos críticos para cumplir con los objetivos a largo plazo del Acuerdo de París dadas las recientes tendencias de las emisiones globales.

El trabajo destaca que, si bien los avances en tecnologías energéticas bajas en carbono están progresando, las capacidades institucionales, como la eficacia de las políticas gubernamentales, "influyen significativamente" en el despliegue exitoso de estas tecnologías a la escala requerida por los objetivos climáticos.

La investigación subraya la importancia de tener en cuenta las distintas capacidades de los países, así como las diferencias regionales, apunta Christoph Bertram, del CGS y autor principal del estudio.

Las conclusiones sugieren que, sin mejoras sustanciales en la gobernanza mundial y sin intervenciones políticas rápidas, la probabilidad de limitar el calentamiento global a los objetivos acordados disminuye, resume por su parte Laurent Drouet, del Centro Euromediterráneo sobre Cambio Climático (CMCC) y también autor. Se pone de relieve, añade, "la urgencia de mejorar los marcos institucionales y las innovaciones tecnológicas para combatir eficazmente el cambio climático".

Para el estudio se usaron ocho 'modelos globales de evaluación integrada' de última generación y multirregionales. Utilizando un conjunto de 20 escenarios de viabilidad diferentes, el análisis constató que la dimensión institucional (es decir, tener en cuenta los límites de los países para permitir una regulación medioambiental eficaz) es la que más influye en la temperatura máxima viable.

Las conclusiones demuestran que una capacidad institucional inadecuada podría obstaculizar el logro de incluso 2 grados, mientras que la mejora del apoyo institucional mundial podría aumentar la probabilidad de alcanzar los objetivos de 1,6 grados en un 25-45 %.

El objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 grados exige "una rápida reducción" de las emisiones de CO2 y una mayor atención a otros gases de efecto invernadero.

A pesar de los avances más rápidos de lo previsto en el despliegue de tecnologías energéticas limpias, las emisiones anuales mundiales de CO2 han aumentado de 2020 a 2023 --descendieron inicialmente en pandemia--, escriben los autores en su artículo.

El análisis revela que, incluso con una descarbonización lo más rápida posible, el mundo solo tiene entre un 5 y un 50 % de posibilidades de mantener el pico de calentamiento por debajo de 1,6 grados, indican sendas notas del CGS y del CMCC.

Junto a las mejoras en la capacidad institucional, el artículo también destaca que reducir la demanda global de energía y apoyar una electrificación más rápida --uso de la electricidad generada a partir de fuentes de energía renovables-- acelera la descarbonización hacia el cero neto y permite alcanzar una probabilidad cercana al 50 % de limitar la temperatura máxima a 1,6 grados.

El objetivo del Acuerdo de París es limitar el calentamiento mundial por debajo de 2 grados centígrados, preferiblemente a 1,5 grados, en comparación con los niveles preindustriales. Este estudio tiene en cuenta las tendencias de las emisiones hasta 2023.

Datos más recientes del Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea, indicaron que junio ​​de 2024 marcó el duodécimo mes en que la temperatura global alcanzó 1,5 grados por encima de los niveles preindustriales.

No obstante, esto no significa el incumplimiento del Acuerdo de París. Para ello, el escenario de aumento de temperatura debería repetirse durante décadas, no meses o años individuales, dice la Organización Meteorológica Mundial.