6 - PAISAJE ÉPICO
(Argentina-España/2024)
Dirección y guion: Valeria Roig
Duración: 74 minutos
Con los testimonios de Enrique Roig, Ana Plaza Roig, Esteban Roig y Diego Ossa
Se exhibe en el cine Gaumont y en Cine.ar Play

El pintor catalán Fidel Roig Matóns no se planteaba objetivos carentes de ambición. Al contrario, lo de este artista llegado a la Argentina en el amanecer del siglo pasado era lo majestuoso, lo imponente, la búsqueda de validar la insignificancia del ser humano al lado de la vastedad inconmensurable de la naturaleza en estado puro. Lo suyo era, como dice alguien en el documental Paisaje épico, “pintar la historia”. Fue así que entre mediados de la década de 1930 y principios de la de 1950 se adentró en la Cordillera de los Andes para fungir como pintor de alta montaña. Eligió para su obra tres lugares de enorme peso simbólico para la identidad argentina, pues por esos mismos senderos había pasado José de San Martín durante algunos de sus ocho cruces, entre los preparatorios y los que realizó al comando de sus tropas, en los primeros años del siglo XIX.

El recorrido lo repiten en la actualidad su bisnieta, la realizadora Valeria Roig, y una prima especializada en estudios artísticos, quienes se detienen en los mismos lugares que sirvieron de inspiración para tres obras que hoy se exhiben de manera permanente en la Pinacoteca Sanmartiniana Fidel Roig Matóns da la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza: Regreso del Gral. San Martín y encuentro con Olazábal en la cumbre del Portillo, Conducción del Gral. San Martín hacia los baños Cauquenes por 60 granaderos y San Martín y su Estado Mayor presencian el paso de las tropas por el Espinacito. O, mejor dicho, “casi” tres, ya que el catalán no llegó a concluir la última a raíz de una progresiva ceguera legada por la exposición a la luz solar y la resolana andinas.

Estas pinturas operan como pilares centrales de un viaje tanto geográfico como temporal, con un ida y vuelta constante entre las aventuras del pasado y las resonancias íntimas desde el presente de las descendientes. El primero, y más interesante, llega principalmente a través de la voz en off del actor catalán Sergi López narrando fragmentos de textos escritos por Roig Matóns en los que describe las extensas travesías, su método de trabajo y los detalles de una logística que incluyó, además de los elementos indispensables para pintar, diez mulas y un campamento ambulante con varios colaboradores. También lo hace a través de los testimonios de familiares y un valioso material de archivo que aborda los primeros años del catalán en la Argentina, la construcción de una familia y los motivos que lo llevaron a interesarse por San Martín.

El segundo se vincula con el viaje de Roig y su prima, quienes a medida que se internan en la cordillera van compartiendo análisis de las obras del bisabuelo de la directora y la variopinta galería de emociones frente al carácter apabullante de un entorno hecho de piedras, tierra y viento. Y frío, mucho frío. La inhospitalidad del entorno cumple un rol fundamental en un relato que pendula entre la bitácora de viaje, el diario íntimo y la exhumación artística y familiar, y que en su núcleo ofrece una forma de vivenciar de primera mano la fructífera relación entre arte, historia y naturaleza.