A semanas de las elecciones en Venezuela, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva habló respecto a las posibles salidas para resolver el conflicto político que enfrenta el país sudamericano. En declaraciones a la prensa, Lula da Silva sugirió que Nicolás Maduro, actual presidente de Venezuela, podría optar por formar un gobierno de coalición con la oposición o, alternativamente, convocar a nuevas elecciones para legitimar su mandato.
El mandatario brasilero destacó la importancia de encontrar una solución que garantice la estabilidad política en Venezuela. “A Maduro todavía le quedan seis meses de mandato. Es el presidente independientemente de las elecciones. Si tiene buen sentido, podría convocar al pueblo de Venezuela, tal vez incluso convocar nuevas elecciones, crear un comité electoral y permitir que observadores de todo el mundo realicen un seguimiento”, señaló Lula, subrayando la necesidad de transparencia en cualquier proceso electoral que se lleve a cabo.
La propuesta del presidente brasilero no se limitó solo a la opción electoral. También sugirió la posibilidad de un gobierno de coalición, donde la oposición tenga un rol activo. “Hay varias salidas. Una es un gobierno de coalición, un gobierno de coalición con la oposición. Hay mucha gente que está en mi gobierno que no votó por mí y otros sí. Todo el mundo va a participar de un gobierno de coalición”, afirmó, enfatizando la importancia de un enfoque inclusivo en la resolución del conflicto.
La respuesta de la oposición venezolana
El planteo de Lula fue rechazado por la líder opositora venezolana María Corina Machado, quien en una conferencia virtual con medios de comunicación chilenos y argentinos, dijo que la idea era una falta de respeto hacia el pueblo venezolano.
“Plantear desconocer lo ocurrido el 28 de julio para mí es una falta de respeto a los venezolanos que lo han dado todo (...) la soberanía popular se respeta”, manifestó Machado, en referencia a las elecciones pasadas, que, según la oposición, estuvieron marcadas por el fraude.
De todas maneras, Lula, apuntó que la crisis venezolana debe ser abordada con seriedad y sostuvo: "No es fácil y no es bueno que un presidente de un país opine sobre la política de un presidente de otro país. Yo mantengo relaciones con Venezuela desde cuando asumí en 2000, tuve mucha relación con (Hugo) Chávez. Y esa relación quedó deteriorada porque la situación política está quedando deteriorada en Venezuela", afirmó Lula.
Y agregó: "Conversé con Maduro antes de las elecciones, ahora no hablé, pero le dije que la transparencia y la legitimidad del resultado era lo que iba a permitir que la gente siguiera peleando para que se suspendan las sanciones contra Venezuela".
Lula dejó claro que espera una respuesta transparente de Maduro y del Consejo Nacional Electoral venezolano sobre el resultado de las elecciones y la situación política en el país. “Queremos que el Consejo Nacional Electoral, que gestionó las elecciones, anuncie públicamente quién ganó”, concluyó.