El miércoles confluyeron dos hechos infames que atentan contra los derechos humanos y la democracia. Se publicó, con la firma Milei, el decreto que disuelve la Unidad Especial de Investigación de la CONADI que se dedicaba a la búsqueda de las más de 300 personas que, sin saberlo, se criaron con una identidad adulterada, por haber sido apropiados por los genocidas de la dictadura. Son los casos que aun quedan por resolver, luego de haber recuperado su identidad 137 nietas y nietos.

Además, por diferencia de un voto, la Cámara de Diputados de la Nación rechazó repudiar y sancionar la visita amable de un grupo de legisladores a los peores genocidas que permanecen presos en la unidad penal de Ezeiza. A los que secuestraron a 30.000 personas indefensas, los torturaron como en la Inquisición, los violaron, los asesinaron y los desaparecieron. La mayoría en los “vuelos de la muerte”, arrojados vivos y dopados desde aviones militares al río de la Plata y al Océano Atlántico. Entre ellos el marino cobarde Alfredo Aztiz, que secuestró a tres Madres de Plaza de Mayo, a varios familiares de desaparecidos y a dos monjas francesas. Esos diputados buscan devolver la impunidad a los genocidas.

Frente a tanta infamia, contrasta la decisión de Cámara de Casación Penal, que dispone la preservación de la documentación sobre el genocidio y de los Sitios de Memoria donde se cometieron los peores crímenes contra la humanidad.

Reafirmamos nuestro compromiso de redoblar la lucha por la Memoria, La Verdad y la Justicia, con las enseñanzas eternas de nuestras queridas Madres de Plaza de Mayo. Convocamos a las nuevas generaciones a sumarse a esta lucha, con la convicción de que la realización plena del ser humano sólo puede ser comunitaria y solidaria, en base a la igualdad en derechos y digidad entre todos los seres humanos. Tal como lo enuncia la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Cárcel común a los genocidas. 

Restitución de las identidades apropiadas. 

Devolución de los restos de nuestros desaparecidos.

Familiares de Desaparecidos y Derenidos por Razones Políticas de Santa Fe