Asociación ilícita, novedad del Fondo de Cultura Económica, reúne 36 relatos pertenecientes al género negro escritos por autores y autoras de América Latina como Leonardo Padura, Juan Sasturain, Bernardo Esquinca, Liliana Escliar, Mercedes Rosende, Patrícia Melo, entre otrxs. 

Desde 1960 el género dinamitó la tradición, rechazó viejas escuelas y construyó sus propias reglas. Tal como sostiene el compilador Nicolás Ferraro, hubo una época en la que era difícil encontrar autores nacionales en las librerías y los latinoamericanos traducían el género desde la imitación o la parodia. ¿Cómo volver verosímil la figura del detective en nuestros países? 

Ferraro sostiene que en estas tierras no elegimos al héroe sino desde qué victima contar. "En países como los nuestros, donde hay un incremento de la pobreza, una brecha social cada vez más profunda, donde la corrupción ya no avergüenza y se descree totalmente de la justicia, las historias que se terminan contando hablan de la podredumbre y el caos que nos rodea. Y de una manera de resistir", señala.