Una organización de pescadores de Río de Janeiro desarrolló una aplicación para registrar derrames de petróleo, desechos de productos químicos, aguas no tratadas de otras embarcaciones, entre otras infracciones medioambientales. Las imágenes son analizadas por los administradores de la aplicación y luego enviadas a las autoridades para que tomen medidas.
La plataforma "De Olho na Guanabara" fue desarrollada por la asociación de pescadores Ahomar y la ong 350.org. Allí, luego de registrarse, los pescadores pueden con una simple foto registrar cualquier cosa que encuentren sospechosa en altamar.
La Bahía de Guanabara, puerto natural de unos 400 km2 y postal de Río, está contaminada desde hace muchos años por el descarte de aguas residuales y basura provenientes de la región metropolitana, así como de viejos navíos abandonados en sus aguas. Y está expuesta a accidentes en las instalaciones de transporte y refinación de petróleo en sus islas y alrededores.
"Antes tomábamos fotos con el celular o una cámara, pero no sabíamos exactamente cuál era la ubicación, dónde estaba esa mancha de petróleo", explica Alexandre Anderson, presidente de Ahomar, mientras filma un torrente de agua descartada desde un buque por un ducto.
"Hoy la aplicación me da la ubicación precisa que necesito para hacer la denuncia", explica, tras registrar lo que parece ser un descarte inapropiado de agua de lastre, empleada en las embarcaciones para equilibrar el peso al navegar.
En mismo viaje en lancha por la Bahía de Guanabara, Anderson se topa con restos de petróleo, químicos de limpieza y otros productos descartados irregularmente, afirma.
Al observar estas situaciones, los pescadores de la Asociación Hombres y Mujeres del Mar (Ahomar) pueden tomar fotos y subirlas anónimamente a la aplicación, detallando lo que ven.
Las imágenes son luego verificadas por un moderador y publicadas en un sitio web. También son enviadas a las autoridades como el regulador ambiental Ibama o la Armada, para que puedan tomar medidas como multas o procesos judiciales.
Pescadores en defensa de la bahía
El objetivo es facilitar la vigilancia de la bahía que los pescadores artesanales realizan ya por cuenta propia. "Los organismos de fiscalización siempre alegaron falta de herramientas para hacer frente a las denuncias", dice Paulo Barone, presidente de la asociación de pescadores de la isla de Paquetá, ubicada en el corazón de la bahía.
Con esta nueva herramienta, las autoridades "no tendrán cómo negar o dejar de atender" las denuncias, confía.
"Los pescadores artesanales están hace décadas en la primera línea de las denuncias sobre la contaminación de la Bahía de Guanabara", confirma Luiz Afonso Rosário, coordinador de campañas de 350.org en Brasil.
"Las empresas de petróleo y gas, además de contaminar las aguas que son fuente de alimentación, ingresos y ocio para miles de familias, agravan la crisis climática al proveer los combustibles fósiles que son la principal causa del calentamiento global", sostiene.
Los pescadores sufrieron especialmente después de un derrame en el año 2000 que vertió 1,3 millones de litros de petróleo de una refinería de Petrobras e hizo mermar la presencia de peces en la bahía. "Aquello acabó con la pesca. Prácticamente no hay más róbalos, merluzas", asegura Roberto Marques Resende, que todavía pesca en la región.