El Tribunal N°1 de Morón denegó este jueves por unanimidad el pedido de excarcelación anticipada al cura Julio César Grassi. De esta manera, continuará preso hasta mayo de 2028, cuando se cumplan los 15 años de condena que pesan sobre él. De acuerdo a lo anunciado por la jueza Mariana Maldonado, los fundamentos se darán a conocer el próximo 2 de septiembre.
Al término de la audiencia, el abogado de las víctimas, Juan Pablo Gallego, expresó: “Es importante que estas audiencias se puedan ver, porque hoy se demostró que se complicó solo”. En el mismo sentido, agregó: “Vimos a un monstruo que redobló su agresividad. Hoy dio una clase de pedofilia”.
"Mi postura es la de oponerme al pedido por el daño que esto le podría producir a las víctimas. Grassi no acepta haber cometido los delitos, no acepta hacer ningún tipo de tratamiento psicológico. El hermano es quien propone el lugar donde va a vivir, pero él también niega los hechos. Por todos esos elementos rechazamos el pedido: por su perfil no está en condiciones de ser externado", aseguró Gallego, en representación del Comité de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño en Argentina (Casacidn).
A partir de las 11 de este jueves, desde la Unidad Penitenciaria N° 41 de Campana, donde se encuentra alojado en un pabellón para presos con buena conducta, Grassi se conectó de manera virtual para ejercer su propia defensa, ya que se recibió de abogado durante sus años de reclusión.
“Yo he militado como sacerdote y con acciones en barrios populares contra todo tipo de maltrato frente a los niños y adolescentes. Para mí, eso es aberrante y lo repudio”, aseveró. Con esos argumentos, el sacerdote pretendía convencer a los magistrados de otorgarle la libertad condicional tras haber completado más de dos tercios de su condena.
“Desde el momento de la acusación, hace 22 años, hasta ahora, no pueden decir nada de mi conducta. El abuso siempre representa una actitud de poder, daño contra una persona débil, y nada de eso ha ocurrido. Voy a ser útil a la sociedad, si la iglesia me lo permite”, sostuvo.
Luego del cuarto intermedio, el cura ratificó su inocencia, y consignó que muchas veces un “error judicial” puede llevar a una "persona inocente a la cárcel".
Los detalles de la condena contra el cura Julio César Grassil
Actualmente, el cura Grassi cumple una condena de 15 años de prisión por dos hechos de abuso sexual de la infancia ocurridos en 1996 en la Fundación Felices los Niños. La Justicia lo condenó recién en 2009. Durante el juicio fue absuelto por otros 15 delitos contra la integridad sexual, que consideraron no se pudieron probar.
A pesar de estar condenado, no fue a la cárcel hasta 2013, cuando la Suprema Corte bonaerense ratificó la pena y se ordenó su detención. En 2014, Grassi volvió a ser noticia, esta vez no por abusar de menores de edad, sino por desviar donaciones otorgadas a la fundación hacia el penal N° 41 de Campana.
Grassi intento, sin éxito, que se utilice en su causa el polémico "beneficio 2x1" --que se aplicó a diferentes genocidas y generó el masivo rechazo de toda la sociedad-- para conseguir la libertad el 7 de agosto de 2026. La ahora derogada ley permitía computar doble los días que pasaron sin sentencia firme a partir del segundo año de detención.
Sin embargo, el 28 de junio de 2022, la condena por abuso al sacerdote fue extendida dos años, hasta el 30 de mayo, tras una apelación presentada por la querella. De esta manera, los 15 años a los que fue condenado el sacerdote comenzaron a regir desde 2013.