"La identidad de la Argentina es la educación pública, porque es la educación pública la que forjó nuestra identidad. Pueden venir con discursos de odio, pero a nuestro pueblo no le van a sacar de la cabeza y del corazón lo que siente por su escuela", sostuvo el gobernador Axel Kicillof, en la apertura del Primer Congreso de Educación, que fue organizado por el municipio de San Martín, la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y el Gobierno de la Provincia.
"Milei miente y estafa, porque no conozco ningún argentino fuera que diga que en 35 años quiere ser Irlanda, estoy convencido que la educación está dentro de los valores que sigue teniendo nuestro pueblo", dijo el gobernador bonaerense bajo una ovación. El congreso al cual asistió contará con más de 80 especialistas, se extenderá hasta 24 de agosto, se desarrollará en 12 sedes del centro de la ciudad y contará con la presentación de más de 470 experiencias educativas.
Estudiantes, docentes y directivos de la educación formal, no formal y comunitaria compartirán sus trayectorias y debatirán con el fin de perfeccionar las prácticas. En ese sentido, Kicillof se refirió a la actualidad y apuntó: "Estos ataques con ideas extrañas esconden un proyecto de disolución nacional, pero si algo deja de bueno este momento, es que da la oportunidad de rediscutir de nuevo y a fondo los factores de la identidad política". El gobernador sostuvo que el desafío es "poder reafirmar la identidad", y que eso "es positivo para el futuro", porque "queda claro que debemos establecer que quienes se oponen a la escuela pública no representan a los argentinos por más que hayan ganado una elección". Indicó que "hay que encontrar" el tono, la forma y el canal, pero que "hay que dar esa discusión".
Por ese motivo, en el congreso participarán 12 universidades nacionales, representantes de más de 25 ciudades y más de seis mil asistentes inscriptos. El viernes 23, por la mañana, en 87 mesas se expondrán las experiencias educativas, que fueron presentadas en los meses previos al Congreso y evaluadas por el área educativa municipal, junto a las autoridades de la UNSAM. El viernes por la tarde, a su vez, habrá 26 mesas de debate con especialistas de diversas temáticas.
"Identidad, desafíos y futuro"
El evento tiene como lema las palabras “Identidad, desafíos y futuro”, y consta de tres ejes organizadores. El primero es "La educación como tejido comunitario", que incluirá experiencias sobre la escuela inserta en la comunidad y el territorio, y su articulación con otras organizaciones e instituciones, ya sea en experiencias de apoyo escolar o en comedores populares. "Estrategias para la inclusión y el aprendizaje efectivo" es el segundo eje, que hará foco en lo que sucede dentro de las aulas de los distintos niveles educativos. El tercer eje, en tanto, será "Diálogos entre educación y trabajo", donde entrarán en debate los últimos años de secundaria, la educación técnica y profesional, y su relación con las universidades.
Kicillof se refirió al lema “Identidad, desafíos y futuro”. Afirmó que "son un acierto" los ejes que se marcaron "por la coyuntura que nos atraviesa", y aclaró que "pese la sorpresa de muchos", hablar de educación "genera interés, convocatoria, y devela compromiso y trabajo". "Hay mucha afluencia de público porque es esencial discutir cada una de estas temáticas, y eso refleja conciencia, compromiso y militancia", remarcó el gobernador bonaerense.
La organización del congreso surgió a 140 años de la sanción de la Ley 1.420 de Educación Común, Gratuita y Obligatoria, y según explicaron, busca "generar un espacio de intercambio para actualizar saberes y analizar las políticas públicas con el fin de reducir las brechas de aprendizaje y promover la equidad". Así lo explicó a BuenosAires/12 el secretario de Educación del municipio de San Martín, Gustavo Perazzo. "Tomamos la efeméride como excusa para parar la pelota, replantearnos, y pensar qué está sucediendo en las escuelas y en la educación", dice el funcionario sanmartiniano a este diario, y amplía: "No es casual que suceda en este momento y bajo este comportamiento del Gobierno nacional, que salió a discutir la educación pública con los tapones de punta. En 140 años de la ley 1.420, ningún gobierno se atrevió a hacerlo, pero estos tipos vinieron a poner en duda que la educación debe ser obligatoria, y llegaron a decir que si un padre necesita que un hijo le de una mano en un taller lo puede sacar de la escuela".
Kicillof hizo hincapié en ello cuando se refirió al clima de época. "Hay determinados discursos que son instalados, que se convalidan y legitiman con decisiones y actitudes, y que teóricamente están permitidos por la sociedad y la opinión pública, pero el sentimiento de nuestro pueblo no es ese", apuntó el gobernador, y sostuvo: "Estoy convencido que el voto a Milei no tuvo el contenido de avalar y convalidar toda la cantidad de barbaridades que se dijeron en esa campaña".
"Nosotros no salimos de un canal de televisión, estuvimos cuatro años ejerciendo el poder con determinados valores, y recorrimos la provincia más grande del país para tener más salud, educación, seguridad, trabajo y producción", comparó Kicillof, que enumeró que en Buenos Aires su gestión cuenta con 7800 obras terminadas en las escuelas de todos los municipios, que amplió 227 instituciones, que construyó desde cero 500 escuelas, y que hizo más de mil aulas nuevas. "También reconstruimos el salario docente, porque defender la escuela es mejorarla, transformarla y revolucionarla, y para eso hay que involucrar a los actores del sistema educativo".
El secretario de Educación del municipio cuenta a este medio que en San Martín, como en todos los municipios bonaerenses, había muchas políticas que eran llevadas adelante junto al Gobierno nacional, como la entrega de computadoras y libros, y los programas de coros y orquestas, "todas cuestiones que desde principio de año se desentendieron y desfinanciaron, al igual que todos los programas socioeducativos", según subraya Perazzo. Advierte que la situación se da a la inversa con el Gobierno provincial "junto a quien sentimos la necedad de, hoy más que nunca, reafirmar el compromiso con la educación y discutir estos temas".
"Todos hablan de economía y números, pero nosotros queremos formar sujetos críticos, para pensar qué pasa en las aulas. La discusión debemos darla los docentes, porque educar es un hecho político y súper necesaria para plantearnos qué país queremos", explica el secretario de Educación del municipio del conurbano bonaerense, que cuenta que la convocatoria al congreso "fue distinta al resto, porque fue bien territorial y abierta para que todos aquellos que estén ligados a los temas educativos puedan contar sus experiencias".
El municipio esperaba contar con la exposición de 100 experiencias, pero recibieron más de 500. Entre esas experiencias, dijeron presente las de la unidad educativa que tiene la UNSAM dentro de la Unidad Penal 48, por lo que el municipio realizó una nota para que el juez permitiera que los internos asistan al congreso, que fue declarado de interés provincial por el Consejo de Educación de la Provincia, y que logró "romper los moldes de la academia", según el funcionario.
Perazzo sostiene: "Estar en las aulas todos los días debería ser una tarea sencilla y no lo es. La escuela contiene, educa y cuida como ninguna otra institución del país. Podemos discutir qué contenidos incluir, qué tecnologías o qué programas, pero no discutir si la escuela tiene que ser pública, gratuita y de calidad o no".
Sobre el final, Kicillof advirtió: "El pueblo argentino está con las Malvinas y contra Margaret Thatcher, quiere industria nacional, quiere trabajo con sueldos y derechos, quiere ciencia propia, nacional y soberana, y valora lo que algunos llaman igualdad, pero que yo llamo justicia social". "Pensar que todo está escrito es un llamado a la inacción, pero el futuro no está escrito y puede ser muy bueno, pero de algo estoy seguro: lo que va a pasar será producto de nuestra construcción social", sentenció el gobernador.