En respuesta a la creciente preocupación por las demoras en la entrega de licencias de conducir en la provincia de Buenos Aires, el Ministerio de Transporte lanzó una medida excepcional: se permitirá a los conductores circular con una "constancia de trámite aprobado" hasta el 15 de octubre. La medida fue adoptada ante la escasez de materiales para la impresión de las licencias físicas.

El problema se originó debido a un faltante de plásticos, una situación que viene afectando a la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) desde que comenzó el año. 

El titular de la cartera de transporte bonaerense, Jorge D’Onofrio, explicó que esta escasez afectó la capacidad del gobierno provincial para gestionar los trámites de licencias. "Esto genera un perjuicio sobre las personas que inician un trámite en la provincia de Buenos Aires, ya que limita los procesos administrativos que permiten la adquisición de insumos para la impresión de las licencias de conducir", señaló el funcionario.

La disposición permite que aquellos ciudadanos que hayan completado los trámites correspondientes en los Centros de Emisión de Licencias (CEL) pero que no puedan recibir su licencia física, circulen con la constancia de trámite aprobada, siempre firmada por la autoridad responsable del CEL.

Además, se requiere que los conductores tengan la licencia digital disponible en la aplicación "Mi Argentina", como una medida complementaria para garantizar la validez de la autorización.

Es importante que los conductores lleven la constancia impresa en sus vehículos, así como una captura de pantalla de la licencia digital, para evitar inconvenientes durante los controles viales, especialmente en zonas con poca señal de internet.

El plazo de vigencia de esta resolución es hasta el 15 de octubre de 2024, con la posibilidad de extenderlo si la situación no se resuelve a tiempo. Finalizado el plazo, los conductores deberán presentarse en el CEL para obtener su licencia en formato físico.

Esta no es la primera vez que la provincia enfrenta este tipo de problemas. A principios de año, una situación similar ocurrió debido a la acefalía en la ANSV, lo que llevó a que el Ministerio de Transporte provincial tomara medidas de emergencia para evitar que los ciudadanos quedaran sin su licencia de conducir.

La resolución intenta, una vez más, mitigar los efectos de una crisis recurrente, permitiendo a los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires seguir conduciendo sin infringir la ley, pero también destacando la necesidad urgente de soluciones a largo plazo en la gestión de estos recursos esenciales.

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