Susy Shock presenta su tercer disco de estudio, Revuelo Sur: Tangos, Milongas y Rioplateadas, en el teatro ND (ex Ateneo) el viernes 4 de octubre a las 21 hs. Este trabajo marca un nuevo capítulo en la carrera de una artista profundamente consciente de su época y, por lo tanto, de la urgencia de poetizarnos.
En sus discos anteriores, Susy nos llevó a explorar los ritmos folklóricos del noroeste argentino, honrando su linaje materno con bagualas, vidalas y chacareras. Pero en esta ocasión, Revuelo Sur se sumerge en las raíces paternas bonaerenses y su sonoridad, trayendo a la luz un repertorio de tangos, milongas y otros ritmos del Río de la Plata. Este nuevo disco, compuesto por 13 canciones, fue grabado en su mayoría en CIAM Tecnópolis en julio de 2023 bajo la dirección musical de Caro Bonillo. El álbum cuenta con la colaboración de destacadxs artistas como Ayelén Becker, Juli Laso, Mocchi, Fernando Noy y Morena García, entre otrxs, y es interpretado por un quinteto de mujeres: Andrea Bazán, Caro Bonillo, Sole Penelas, Solana Biderman y Hora Vázquez.
La elección del tango y de otros ritmos rioplatenses no es casual. En una entrevista realizada en la casa de Futuro Trans, Susy explica cómo este disco es una reconexión con sus raíces paternas, pero también una reivindicación de la presencia travesti en la historia cultural del Río de la Plata. En una fresca y nublada tarde de invierno, me reuní con Susy para conversar sobre este nuevo trabajo que, como ella misma señala, es el más personal de los tres que ha lanzado hasta ahora y está dedicado a Joel Papazo, tanguero de ley.
Susy, tu primer disco, "Buena Vida y Poca Vergüenza", marcó una época en la que prácticamente no había otras voces travestis-trans en la música popular. ¿Cómo ha sido la evolución hasta llegar a "Revuelo Sur"?
Susy Shock: "En ese momento, las otras travas que escribían eran Claudia con K y Naty Menstrual. Necesité ser autora porque no había un folklore que hablara de mí. No había otras artistas travestis trans componiendo chacareras desde una voz propia. La diferencia entre el lanzamiento del primer disco y este es que ha habido un crecimiento del protagonismo travesti-trans en la escena artística en general y en la música en particular. Ahora hay una multiplicación de voces, antes no había artistas trans en el folklore. Con el tiempo eso fue cambiando hasta el punto que en este disco las canciones no tienen que ser todas mías, y eso me hace sentir que estamos construyendo algo más grande, que va más allá de las coyunturas. Hoy más que nunca, tenemos que afirmarnos en esas certezas. Esto es algo que llegó para quedarse.
El Tango de la Navaja es una composición conjunta con Marina Matthey (trava brasilera), ella musicalizó una letra mía. La letra de La Capricho me la regaló Morena García y grabó unos fragmentos en carrilche (argot travesti), Andrea Bazán lo musicalizó como un vals criollo. El otro regalo fue el de Valen Bonetto.”
“Las canciones no tienen que ser todas mías” Esa afirmación no es menor. En un momento cultural y social donde la exaltación del yo, el individualismo y la competencia marcan el ritmo de este tiempo, el gesto de Susy Shock de abrir espacio para otras voces travestis y trans en su propio trabajo es una acción micropolítica que muestra una vía posible en el aquí y el ahora. En lugar de reclamar un protagonismo absoluto, Susy opta por el "teje" colectivo, por la creación en red, un enfoque que no solo enriquece su música, sino que también fortalece los lazos dentro de la comunidad travesti-trans en particular y en la sociedad en general.
Este "teje" colectivo al que hace referencia Susy no es un simple gesto altruista; es una estrategia de supervivencia y crecimiento. La autogestión y la ética travesti que ella defiende se basan en la idea de que "una nunca es sola". La colaboración, la ayuda mutua y el trabajo en red son esenciales en un mundo que, como ella señala, "por hetero amoroso y culposo, nos auspicia todo y no nos deja crecer".
El título de tu disco, Revuelo Sur, evoca una imagen potente. ¿Qué representa para vos este "revuelo"?
Susy Shock: Revuelo es el último giro que da el gallo antes de acertar el espolón cuando ataca, un movimiento final antes de dar el golpe. En términos más amplios, Revuelo Sur es un disco para esta época, con letras que llevan la impronta de los 90, pero que miran hacia Susy Shock: el sur como su norte cardinal. Es también una manera de reafirmar nuestra presencia, de decir 'Acá estamos las travas, siempre estuvimos'.
Ese "revuelo" no es solo un movimiento simbólico; es una afirmación de la identidad travesti y un posicionamiento decolonial en un género musical que, históricamente, ha sido dominado por la masculinidad y la heteronorma. Al adentrarse en el tango, Susy Shock no solo explora un estilo musical tradicionalmente rioplatense, sino que lo travestiza, lo transforma, lo hace propio. Como ella misma dice: "Si el tango nace en los piringundines, con las trabajadoras sexuales, las putas, o como se autoperciban, entonces las travas también estábamos ahí porque ese fue nuestro lugar desde siempre. Si todos los creadores maravillosos del tango cogieron con putas, entonces cogieron con travas. Este disco recorre esa presencia travesti en el Río de la Plata, en la música, en la negritud, en todo aquello que ha sido marginado pero que siempre estuvo presente.”
“Los cantantes y las cantoras del tango son divas. Virginia Luque, tan drag king, de la época de blanco y negro, tan drag king. Hay algo ahí que pasó desapercibido en ese momento, que está camufladísimo en el tango. Este género empezó siendo bailado entre hombres, nació en los prostibularios, está lleno de un montón de cosas que huelen un montón a nosotras antes que a ellos, pero ellos lo hicieron propio. Está lo sexy también, pero hoy está explotado para la vidriera, el turismo, está higienizado. Pero hay algo de eso que es absolutamente de los márgenes, roto, sucio, todas son putas y se enamoraron de cantantes. Hay algo de esa génesis que es imposible de limpiar. El tango es eso, por eso nos pega de esa manera”, Susy Shock.
¿Qué te llevó a explorar el tango en este momento de tu carrera?
-El tango me conecta con mi padre y con una historia de amor que necesitaba vivir para poder crear este disco. Sin esa experiencia, el disco habría sido solo un ejercicio teórico, porque el tango se canta desde el sufrimiento. Aunque mi madre, con su herencia tucumana, fue una figura central en mi vida, y hace 11 años que no está, me estoy acercando más a mi padre, que siempre ha estado ahí, acompañando amorosamente. Su pasión por el tango y su historia en Buenos Aires me han inspirado a explorar este género desde una perspectiva más íntima y personal. Mis discos son conceptuales. En este, con la música del Río de la Plata, estoy diciendo “Acá estamos las travas, siempre estuvimos”. Cuando ese poeta le escribió a la Mireya, ¿quién dice que la Mireya no era una de las nuestras? Si estábamos ahí. Hasta Arlt lo sabía y vos nunca tuviste el coraje de contárselo a los chochamus. Porque Roberto Arlt habla de un muchacho disfrazado de mina que un cliente lo va a buscar. Pero Arlt era hetero y lo cuenta así, por eso nosotras tenemos que contar nuestra historia, porque esa era una trava. Nosotras estábamos ahí.
¿Por qué reescribir la historia del tango en clave travesti-trans hoy?
-Es imposible pensarnos fuera de la época y mi época es previa a la Ley de Identidad de Género, porque yo soy de la generación del Nunca Más, soy la trava que fui y que me constituí en una adolescencia donde volvían los que se habían ido, se hablaba de lo que no se podía, y porque estalló esa hermosa libertad, donde la gente decía lo que tenía que decir y ser lo que tenía que ser. Creo que hoy la estrategia es mezclarse. No tengo miedo que me descoloree estar en una ronda de otras amorosidades y voluntades. Hay que hacer dos trabajos. Hacia adentro sanar, estas generaciones jóvenes que vienen lastimadas, asustadas, descreídas de esos vínculos de familias horribles, expulsadas, trabajar eso en carácter de urgente, hacer nidos y trincheras. Aprender a sanar, duelar en grupo. Y al mismo tiempo hacia afuera, generar una vanguardia travesti trans muy específica que salga a explicarlo todo de nuevo. Hablar otra vez con lxs vecinxs, sin intermediaciones, porque han fallado.
En Revuelo Sur, Susy Shock nos ofrece una visión del tango que recupera esa raíz marginal y la mezcla con una estética travesti que no teme mostrarse pendenciera. La actitud asertiva y desafiante de La Navaja es clave para el momento histórico que estamos viviendo “Cruzá la calle porque aquí paso yo”, “No me apures, no me enojes.”
"Esas canciones reflejan la estética del disco: una navaja en la boca. No nos van a respetar nunca, así que que nos tengan miedo. Necesito que sepan que estamos armadas, que no tenemos miedo y que deben cruzarse de vereda, porque nos siguen matando", dice Susy Shock.
Mencionás que el tango tiene una estética que te permite explorar el dramatismo y la teatralidad. ¿Cómo influyó esto en la producción artística del disco y en la presentación en vivo?
-El tango tiene una teatralidad que te envuelve. Con Endi Ruiz, estamos trabajando en la producción artística de la presentación en el ND, donde queremos explotar esa dimensión. El tango me permite jugar a ser diva, a experimentar el dramatismo, el desgarro. Hay una actitud que te da el tango, te parás al lado del tango y sos Norma Pons.
Revuelo Sur reafirma a Susy como una artista que no sólo travestifica los géneros musicales, sino que al reescribir la historia e inscribirse en ella nos recuerda que importa qué historias cuentan historias y qué mundos mundializan mundos, sanando a la vez individual y colectivamente con la potencia que solo el arte puede canalizar.