El 26 de agosto de 2021 el diputado provincial de Corrientes Miguel Arias fue víctima de un atentado con un arma de fuego mientras participaba del cierre de campaña del Frente de Todos (FdT) en la localidad de Tapebicuá, de cara a la elecciones provinciales. A tres años del trágico suceso, el político aún pide una justicia que no llegó.
"Fue muy traumático para mi familia y todos los que me quieren bien. Enterarme cómo iba la investigación fue lo más dramático", lamentó Arias este martes, en diálogo con la 750.
Así recordó el exdiputado esa jornada: "Fue un acto en una localidad muy pequeña y con muy pocos concurrentes. En mi caso particular, como diputado fui a apoyar a los candidatos locales que disputaban la Municipalidad de ese lugar. Todo hacía presuponer que iba a ser un acto muy tranquilo, muy familiar, porque éramos todos conocidos. Después de haber dado mi discurso y ya sentado -no me di cuenta de nada- recibí un balazo en el abdomen. Me advirtió que estaba sangrando quien estaba a mi lado. Me trasladaron hasta el hospital de Paso de los Libres, atrás tirado en la camioneta de la policía. Después de la cirugía fui trasladado a Corrientes para estar con más resguardo y en un centro de más alta complejidad. Estuve una semana internado en terapia intensiva y después me enteré de todo lo que pasó", relató.
"Estábamos a tres días de las elecciones para Gobernador y eso hizo que el Gobierno provincial saliera a desviar la atención, utilizar políticamente el hecho y tratar de inculpar a los que me acompañaron, cosa que después quedó desmentido", afirmó.
"Lo que se demostró después es que el disparo fue efectuado de larga distancia, con un arma larga, pero esa investigación fue a través de un peritaje que yo contraté de forma privada. La Justicia correntina lo que hizo primero fue tratar de inculpar a la oposición y después que la causa quedase en vía muerta y no se investigara más nada, porque tengo la cuasi certeza de que fue alguien del otro espacio político, por lo que se trató de que no se supiera la verdad. Y así estamos, a tres años de lo ocurrido", señaló.
Arias calificó su atentado como un prefacio a lo que le sucedería meses más tarde a la exvicepresidenta Cristina Kirchner, además de la "instalación de la violencia política" aún vigente en el Gobierno de Javier Milei.
"Tuve la sensación de que se estaba instalando de alguna manera, más allá de que los hechos no tenían una relación directa entre la violencia como una manera de atentar contra un adversario político y de dirimir cuestiones políticas", dijo.
"Creo que lo que pasó fue el preanuncio de lo que fue el atentado a Cristina y que después siguió en este estado de violencia, donde ya lo que suponíamos superado en la historia argentina vuelve a repetirse: la violencia política instalada como un método para imponer voluntades", cerró.