La preocupación por el funcionamiento de los trenes de cercanía se agudiza. A los reiterados problemas en el servicio que va de Rosario a Cañada de Gómez –que este miércoles volvió a suspenderse– ahora se le suman inconvenientes en el tren que va de Rosario a la terminal de Retiro, en la Ciudad de Buenos Aires. El martes por la tarde el servicio se canceló por desperfectos en las comunicaciones y las personas, que aguardaron durante dos horas adentro de los vagones, debieron bajarse sin poder viajar. “Venimos señalando que hay un proceso de degradación planificada del transporte ferroviario en todo el país”, denunció el diputado nacional por la provincia de Santa Fe, Eduardo Toniolli. La semana pasada, el Concejo de Rosario también manifestó su preocupación con un pedido de informes, respecto al estado de los trenes, frecuencias, protocolos e inversiones en la materia. “Ambos trenes mantienen cifras records de pasajeros. ¿Por qué entonces debilitar un negocio que tiene cada vez más clientes?”, cuestionó el concejal Lisandro Cavatorta.

El martes por la noche, el famoso tren “El Rosarino” debió suspender el servicio que partía a las 19.30 desde la terminal de Retiro con destino a Rosario. Después de esperar dos horas sentados en sus asientos, los pasajeros recibieron la comunicación de la empresa: el viaje quedaría suspendido por un problema en el sistema de comunicaciones. Por ese mismo motivo tampoco salió el servicio que parte desde la estación Rosario Norte durante la madrugada. “Aparentemente la falla fue solucionada, pero es un grano más de arena en este médano de debacle que venimos viendo en materia ferroviaria”, señaló Mariano Antenore, referente de la agrupación Amigos del Riel, a Rosario/12.

En el caso del tren a Cañada a de Gómez, lo que predomina es la irregularidad y la incertidumbre. Es que su locomotora funciona como una suerte de “repuesto” de otros servicios de mayor distancia. Eso es lo que sucedió, nuevamente, este miércoles: el servicio fue cancelado porque la locomotora quedó afectada al servicio Córdoba-Retiro. Ese tipo de situaciones se vienen presentando desde principio de año y en las últimas semanas se agudizó el problema. Los inconvenientes alcanzan a un universo de 9 mil ciudadanos de la región que, en promedio, utilizan el servicio todos los meses.

“Hay una gran inestabilidad en los cuerpos gerenciales de las empresas. Volvieron a remover a los gerentes del ferrocarril Mitre, entonces no hay nadie que tome decisiones y ponga la firma. Nadie se hace responsable porque los viven cambiando del cargo y lo que hay es un desgobierno en la empresa. Difícilmente cambie algo hasta que no haya un cuadro gerencial estable y se asignen recursos para que los servicios salgan”, evaluó Antenore. “Lo que pasó con el servicio Retiro-Rosario es parte de la acefalía que hay. Dos horas esperaron los pasajeros, ¿nadie pudo definirlo antes? Y con el tren a Cañada de Gómez, hoy por hoy, es una lotería”, añadió.

Concejal Cavatorta y diputado Toniolli.
 
 

 

Respuesta política

Este lunes los usuarios del servicio Rosario-Cañada de Gómez realizaron una jornada en defensa del tren que comenzó en la estación Rosario Norte y recorrió todas las paradas regionales, involucrando a dirigentes, funcionarios y autoridades de las distintas localidades que forman parte del tramo. El reclamo fue concreto: que el gobierno nacional garantice las inversiones correspondientes para que los usuarios tengan la certeza de poder seguir contando con ese servicio de transporte diario. “La cantidad de pasajeros que se suben marca que los vecinos de la región abrazaron el servicio, porque encontraron una salida más económica y segura. Lejos de estar en caída, es un servicio que viene creciendo”, señaló Toniolli en diálogo con Rosario/12.

Para el diputado nacional del peronismo, lo que está sucediendo no se corre de las intenciones del gobierno nacional: “Venimos señalando que hay un proceso de degradación planificada del transporte ferroviario en todo el país. Eso tiene que ver con las intenciones claras que se han explicitado con la Ley Bases, primero intentando privatizar la infraestructura ferroviaria y después dejando sujetas a disponibilidad a las empresas operadoras del servicio. Para eso, están degradando el servicio de manera consiente y planificada, dejando caer servicios por falta de mantenimiento y bajando frecuencias”.

En ese marco, Toniolli recordó que la problemática viene siendo tema de agenda en un sector del Congreso con pedidos de informe, interpelaciones a funcionarios en comisiones y el planteo de cuestiones de privilegio en el recinto. Pero desde el gobierno nacional no acusan recibo. “Buscan que la gente no use más el servicio, pero nosotros vamos a defenderlo a muerte. Entendemos que cuando haya un gobierno de otro signo político que sí priorice el tren, siempre es mucho más fácil sostener lo que está, que volver a arrancar todo de cero”, expresó y agregó: “Tardamos 45 años en recuperar uno de los corredores que formaban parte de la segunda red ferroviaria metropolitana de transporte de pasajeros por su extensión. Para nosotros es solo un puntapié inicial para recuperar toda la red metropolitana”.

En Rosario, el tema también formó parte de la agenda del Concejo. Durante la última sesión, el cuerpo aprobó por unanimidad dos pedidos de informes que buscaban tener información detallada sobre los servicios de trenes Rosario-Cañada de Gómez y Rosario-Retiro. El pedido fue impulsado por el concejal justicialista, Lisandro Cavatorta. En diálogo con Rosario/12, el edil también puso el foco en el aumento en la cantidad de pasajeros que viene experimentando el servicio. “Ambos trenes mantienen cifras records de pasajeros. ¿Por qué entonces debilitar un negocio que tiene cada vez más clientes?”, cuestionó.

Para Cavatorta, la cuestión económica es uno de los aspectos importantes para mantener el tren y lo ejemplifica: durante julio, un trabajador que tuvo que viajar de Roldán a Rosario, pagaba $400 el boleto, mientras que el pasaje en colectivo costaba $2.642. Eso, trasladado a todo el mes, le genera al usuario un ahorro cercano a los 90 mil pesos. “Esa plata el trabajador después la invierte en negocios, en bares y en kioscos de la ciudad. No se trata solo de pagar más barato un boleto, sino de mover la economía. Y me parece que el gobierno no entiende cómo funciona la movilidad y el transporte público de pasajeros en el mundo”, analizó.

 

Por último, el concejal reclamó una postura más activa tanto del gobernador Maximiliano Pullaro, como del intendente Pablo Javkin, en el reclamo ferroviario: “Siguen firmando pactos con el gobierno nacional. Fueron nueve veces a la Casa Rosada y no hay una sola obra pública, ni una sola ruta arreglada por el gobierno nacional. Y como si fuera poco, el gobierno nacional se empeña en destruir algo que andaba bien. No se trata de hacer visitas guiadas a la Casa Rosada, sino de defender los intereses de los rosarinos y los santafesinos”.