La diputada nacional Gisela Marziotta presentó un proyecto de ley para declarar el 1º de septiembre, día en el que intentaron asesinar a la exvicepresidenta Cristina Kirchner, como el Día Contra la Violencia Política. La iniciativa fue anunciada junto al legislador Juan Pablo O'Dezaille quien llevó la propuesta a la Ciudad de Buenos Aires.
Marziotta explicó cómo surgió la iniciativa y aseguró que el objetivo tiene que ver con reflexionar sobre la importancia del cuidado de la democracia. Precisó que no tiene que ver con un tema partidario, y que “cuando quisieron matar a Cristina, estaban matando un poco a cada uno” de los argentinos.
“No está bueno que nos tengamos que encontrar para hablar de que hace casi dos años quisieron matar a Cristina. Pero era necesaria la iniciativa para contarles un poco la necesidad de tener —no una efeméride más— una jornada de reflexión cuando llegamos a la máxima expresión de la violencia política”, comenzó el discurso.
Luego, la diputada explicó que sería un error pensar que se trata de una iniciativa partidaria. Lejos de eso, remarcó que el objetivo es el cuidado de la democracia, algo que debería estar presente como imperativo en cada uno de los espacios políticos que integran el Estado.
“Un día de lucha contra la violencia política no es solo para los que queremos a Cristina. No nos tenemos que quedar con el nombre propio, sino con el concepto mayor que está por encima, que es la democracia. Porque fue un atentado contra la democracia de la República Argentina”, señaló.
Y, tras recordar todos los condicionamientos que puso en su momento Juntos por el Cambio para repudiar en Congreso el atentado, dijo: “¿No pueden poner por encima del odio la defensa de la democracia? Porque no es la defensa de Cristina. A Cristina la defendemos nosotros. Pero la democracia la defendemos todos y todas”.
Tras la intervención al público, Marziotta añadió en diálogo con la 750: “La idea es que sea una jornada de reflexión, que se hable en las escuelas y en los medios de comunicación. Cuando la quisieron matar a Cristina, nos estaban matando un poco a cada uno de los argentinos”.
Por su lado, Juan Pablo O'Dezaille sostuvo que el proyecto tiene que ver con la necesidad de abordar desde el plano político y no solo judicial un tema fundamental, como lo es el acuerdo democrático que se formó después de la larga noche de la dictadura militar.
“Vivimos una democracia debilitada desde el punto de vista económico, social y a nuestro entender, en la actualidad, en peligro al no advertir la gravedad de no condenar desde al arco político la rotura de ese pacto y lo que significa el comienzo de un espiral de violencia política, sostuvo.
A lo que añadió: “La sociedad en su conjunto planteó el no volver a tomar la violencia política como una forma de resolución de las diferencias ideológicas. En tiempos donde desde el Estado nacional parece que todo está permitido, nosotros pensamos que no todo vale”.
Informe Marisol Juárez para la 750