El fiscal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas (UGAP) de Tartagal, Gonzalo Vega, afirmó que el hombre imputado por el homicidio de un joven wichí se encuentra detenido, después de que la fiscalía pidiera la prisión preventiva.

El funcionario judicial dio esa respuesta a Salta/12 tras los reclamos realizados por referentes de las comunidades wichí del pueblo de Coronel Juan Solá (Estación Morillo), en el departamento Rivadavia, que protestaron por la falta de información y presuntas irregulares en el proceso.

El hecho, que ocurrió hace unas tres semanas en el paraje Montevideo (a unos 60 kilómetros de Morillo), fue confesado por el imputado. Vega contó que, en su declaración, este hombre, de 60 años, afirmó que todo sucedió cuando Carlos Saravia, el joven wichí de 20 años, quiso entrar a robarle.

En esta situación él tomó una escopeta y, según su relato, forcejearon. El ahora acusado sostuvo que Saravia quería quitarle el arma para dispararle, pero en medio del forcejeo fue él quien terminó ejecutando el disparo e hiriendo de muerte el joven indígena. 

Referentes de las comunidades wichí que se manifestaron expresaron su temor de que el imputado acceda a la prisión domiciliaria. Según dijeron, se habían enterado de esa posibilidad por dichos de la Policía. Sin embargo, el fiscal Vega dijo a este diario que no existe por el momento pedido de la defensa en ese sentido.

En cuanto al pedido de prisión preventiva, afirmó que lo solicitó dado que el imputado reconoció que, si bien vive en el paraje mencionado, no suele estar solamente en ese lugar. 

En cuanto a las quejas de las comunidades por la demora en la entrega del cuerpo, el fiscal indicó que Saravia falleció minutos después del disparo y cuando llegó la Policía, ya estaba muerto. “Es un lugar inaccesible y fue todo un proceso el que se tuvo que generar para devolver el cuerpo”, indicó.

Por el momento se buscan a testigos presenciales, dado que, según aseguró el fiscal, “cerca del lugar (del hecho) está el río (Bermejo), y ahí se escucharon los disparos” por parte de algunos pescadores.

Para esta semana se tenía previsto citar a la hermana de Saravia. Ante los reclamos de las comunidades, Vega aclaró que “nadie se comunicó con la Fiscalía para consultar del caso. Cuando la gente se acerca siempre se les explica cómo será el proceso y les pedimos la paciencia necesaria”.