El primero de los 247 pozos de petróleo del Bloque 43-ITT, uno de los principales yacimientos de crudo de Ecuador, fue apagado como parte del proceso de cierre de esta explotación que los ecuatorianos decidieron desmantelar en un histórico plebiscito celebrado hace más de un año.
Si bien el dictamen de la Corte Constitucional que dio luz verde a la celebración del plebiscito marcaba que la decisión se ejecutara en el plazo de un año, el ministro de Energía y Minas de Ecuador, Antonio Gonçalves, aseguró este miércoles que el Gobierno contempla un plazo de cinco meses para que el cierre de los pozos y el desmantelamiento de la infraestructura se hagan en condiciones seguras para el medio ambiente y las comunidades indígenas aledañas.
El pozo cerrado
El Bloque 43-ITT, que abarca los campos Ishpingo, Tambococha y Tiputini, se encuentra dentro del Parque Nacional Yasuní, una de las áreas de la Amazonía con mayor concentración de biodiversidad del planeta y hogar de pueblos indígenas en aislamiento voluntario como los tagaeri, taromenane y dugakaeri.
"Cumplir con el cierre del ITT no es un trabajo fácil, requiere de planificación especial y técnica", precisó Gonçalves durante su visita de este miércoles al bloque para supervisar el cierre del primer pozo.
El pozo clausurado este miércoles es el Ishpingo B-56, un pozo direccional, en el cual se realizó el apagado y abandono. Posteriormente se procederá a la extracción del equipo electro sumergible y de la tubería de producción, según explicó el Ministerio de Energía y Minas en un comunicado.
Después se realizarán labores de limpieza del pozo y seguidamente se colocarán tapones de cemento para el abandono definitivo de la estructura. Con el cierre de este pozo, el volumen de producción del Bloque 43-ITT se reducirá progresivamente, advirtió el Ministerio.
El plebiscito
El plebiscito sobre el Bloque 43-ITT se celebró el 20 de agosto de 2023 y un 58 % de los ecuatorianos votaron a favor de su cierre y desmantelamiento, pese a contar con reservas de petróleo valoradas en unos 13.800 millones de dólares para los próximos 20 años.
Esta votación sentó un precedente mundial al ser Ecuador el primer país que de manera democrática votaba por clausurar una explotación petrolera para preservar el Parque Nacional Yasuní, una de las áreas de mayor biodiversidad del mundo, al albergar más de 2.000 especies de árboles y arbustos, 204 de mamíferos, 610 de aves, 121 de reptiles, 150 de anfibios y más de 250 de peces.
El reclamo ecologista
La consulta popular fue promovida por el colectivo ecologista Yasunidos, que logró reunir 757.000 firmas a favor de ir a las urnas, y libró una batalla legal de diez años con las instituciones del Estado hasta que tuvieron luz verde para llevar a cabo la votación.
Yasunidos emitió este mismo miércoles un comunicado en el que acusó al presidente del país, Daniel Noboa, de burlarse del pueblo al incumplir el fallo constitucional que marcaba el plazo de un año para cumplir con el mandato popular del plebiscito.
"No han hecho absolutamente nada" por cumplir las disposiciones emitidas por la Corte Constitucional, que validó la consulta popular de agosto de 2023, añadió el colectivo al asegurar que hay un "incumplimiento flagrante" sobre el pronunciamiento del pueblo, ya que continúa la explotación petrolera "hasta el día de hoy".
"La falta de avance en el cierre progresivo y ordenado" de las unidades petroleras "demuestra que la intención (del Gobierno) nunca fue cumplir con la voluntad del pueblo ecuatoriano", insistió Yasunidos en su escrito. Asimismo, tildó como otra "burla" del Gobierno el informe que advierte del cierre de un solo pozo del Bloque 43-ITT.