Intendentes de la quinta sección de la provincia de Buenos Aires se reunieron en la ciudad de Dolores junto al ministro de Salud de la provincia, Nicolás Kreplak, para discutir la creciente crisis sanitaria generada por la falta de apoyo y recortes del Gobierno Nacional liderado por Javier Milei. El cónclave, que se llevó a cabo en el contexto de un notable ajuste en el presupuesto destinado a la salud, tuvo como objetivo central la creación de una agenda común que permita mitigar los efectos de la ausencia de políticas sanitarias nacionales en los municipios.

Según pudo saber Buenos Aires/12 mediante fuentes cercanas a la reunión, Kreplak alentó a los intendentes a comunicar claramente a la ciudadanía las graves consecuencias que las decisiones del Gobierno Nacional están teniendo en el sistema de salud pública. El ministro señaló que, ante el desmantelamiento de programas esenciales y el regreso del impuesto a las ganancias para los médicos que realizan guardias, la situación en los hospitales provinciales se está volviendo insostenible.

A su vez, Kreplak manifestó su preocupación porque con el retorno del impuesto a las ganancias por la Ley Bases, alrededor de un millón de médicos volverán a pagar por hacer guardias y esto genera efectos gravísimos por la reducción del personal en hospitales, en medio de un panorama de explosión sanitaria.

Un ejemplo que refleja el aumento de la demanda es el del Hospital San Roque en Dolores, que ha experimentado un aumento del 150 por ciento en la atención hospitalaria en los últimos seis meses, pasando de 4.800 personas atendidas en diciembre de 2023 a 10.355 en junio de 2024.

En lo que va del año, el hospital ha brindado atención a 45.015 pacientes, de los cuales un 40 por ciento contaba con obra social, lo que refleja la magnitud de la crisis sanitaria, según indicaron desde el municipio a este diario. A través del trabajo conjunto entre la intendencia de Juan Pablo García y el gobierno provincial, se ha implementado un nuevo sistema organizacional y de digitalización que ha permitido, en parte, enfrentar esta situación y mejorar el esquema de atención.

Los intendentes presentes, entre ellos Héctor Olivera (Tordillo), Juan Manuel Álvarez (Ranchos), y Walter Wischinivetzky (Mar Chiquita), coincidieron en que el ajuste en salud está generando un daño irreparable, especialmente en las poblaciones más vulnerables. Hicieron hincapié en la necesidad de fortalecer la articulación con la provincia para asegurar que, a pesar de los recortes nacionales, los ciudadanos sigan teniendo acceso a una atención médica de calidad.

Otro de los temas más preocupantes debatidos fue la reciente modificación en el esquema de cobertura de medicamentos del PAMI, que ha reducido drásticamente la cobertura de remedios esenciales para los jubilados, limitándola a un 40 por ciento o 70 por ciento, dependiendo del caso. Esta situación ha obligado a muchas personas mayores a recurrir al sistema de salud pública, incrementando aún más la presión sobre los hospitales provinciales.

En respuesta a la crisis, el ministro Kreplak reafirmó su compromiso de que el gobierno provincial hará todo lo posible para cubrir las necesidades desatendidas por el Ministerio de Salud de la Nación. Además, destacó el proyecto de ley de Daniel Gollan, presentado en la Cámara de Diputados de la Nación que busca eximir del impuesto a las ganancias a los profesionales de la salud que realizan guardias y horas extras. Esta medida es considerada esencial para evitar la pérdida de personal en los hospitales, donde ya los propios funcionarios se están poniendo el ambo para ayudar a cubrir las guardias y que la gente no se quede sin atención.

El respaldo a esta iniciativa creció aceleradamente en diversos municipios bonaerenses, tanto de Unión por la Patria como de la oposición, con 23 concejos deliberantes ya votando a favor de la adhesión. De este modo, los intendentes acordaron seguir trabajando en conjunto para enfrentar los desafíos que presenta la situación sanitaria actual y buscar soluciones que permitan garantizar el acceso a la salud para todos los ciudadanos, a pesar de las políticas nacionales adversas.

Finalmente, sobre el cierre de la reunión, los intendentes acordaron continuar trabajando de manera coordinada para enfrentar los desafíos que presenta la crisis sanitaria actual. La reunión en Dolores fue un paso clave para reforzar la cooperación entre los municipios y el gobierno provincial, y para establecer estrategias que permitan mitigar los efectos de las políticas nacionales adversas de Milei en la salud pública.

Guardias y medicamentos en peligro

Martín Latorraca, médico clínico y secretario de Salud del municipio de Morón, así como director ejecutivo del Consejo de Salud de la Provincia de Buenos Aires (COSAPRO), ya había expresado su preocupación ante este medio sobre el deterioro en los planteles básicos de salud debido a la carga del impuesto a las ganancias sobre los trabajadores médicos. "Ya nos están faltando médicos y médicas que cubran guardias", advirtió Latorraca, reflejando una preocupación que también ha sido manifestada por el ministro Kreplak y los gremios del sector.

Además de la crisis de personal, otro problema grave es la reducción en la provisión de medicamentos a través de programas nacionales como el RemediAr. Según Latorraca, aunque el programa no ha desaparecido, la cantidad de productos distribuidos ha disminuido drásticamente, lo que ha llevado a que centros de salud reciban apenas "dos cajas de ibuprofeno" en cada envío.