Las cifras del Banco Central (BCRA) muestran que ha habido, en el último tiempo, un crecimiento de los depósitos en dólares. Si bien el mes aún o terminó, los datos de la entidad que conduce Santiago Bausili reflejan que hubo suba de 484 millones de dólares, totalizando casi 19.100 millones. Todo esto se da cuando los sectores económicos aún dudan de qué política cambiaria ejercerá el gobierno de Javier Milei, y mientras la cotización oficial está intervenida por decisión oficial, con el objetivo puesto en que no se recaliente la inflación.

Con estos números, los stocks de BCRA se ponen casi al mismo nivel que tenían en los últimos meses del 2019, momento previo a la sangría de depósitos que se generó luego de la victoria de Alberto Fernández sobre Mauricio Macri, donde hubo una fuerte salida de dinero.

En este contexto, si se considera la situación desde que Milei es Gobierno, se observa que hubo una suba de depósitos de casi 5000 millones de dólares, de los cuales 3269 corresponden a los que ingresó al sistema en 2024. Cabe aclarar que esta recomposición de los stocks se dio de manera más o menos pareja hasta junio, mes en el cual subieron menos que un punto. 

El momento coincide con el de mayor turbulencia del Gobierno, tanto en materia política como en lo que respecta a la confianza externa por la incapacidad de conseguir divisas para apalancar las reservas del BCRA. Vale decir que, luego, tanto en julio como en agosto ya creció por encima de los dos puntos. 

Fuentes del mercado especulan que el fenómeno de los últimos meses está directamente relacionado con acciones previas al blanqueo de capitales. Se espera que ese movimiento se empiece a incrementar en las próximas semanas, lo que coincide con la mirada oficial de que el blanqueo tendrá una buena cosecha de divisas. 

Tal como adelantó hace meses este diario, en el Gobierno creen que el perdón a evasores cosechará al menos 25 mil millones de dólares. Una parte de eso podría ir a depósitos en cuentas en moneda extranjera. Quieren equiparar los efectos que se produjeron en el último blanqueo, el de la era Macri, que en el año 2016 empujó fuerte el nivel de depósitos en dólares. Naturalmente, y si bien la recomposición de stocks es una buena noticia, la preocupación del mercado continua ante la imposibilidad del ministro de Economía, Luis Caputo, de cerrar financiamiento externo en dólares. 

Eso generó que consultoras pusieran en duda la capacidad de la gestión de Hacienda para garantizar los pagos de deuda pendientes. Sobre todo los del año próximo, período que además de tener elecciones legislativas, exigirá al límite las capacidades de pago de gobierno libertario. Por eso, en el Gobierno estiman que es urgente salir a buscar dólares al exterior para cubrir lo que el Fondo Monetario ya aclaró que no prestará.