"No queremos que la estrategia de la provincia de Buenos Aires se agote en sus propias necesidades. Sería miope, necio, tonto, torpe y mentiroso pensar que podemos resolver la cuestión logística de la Provincia sin consultar, sin ponernos de acuerdo, sin discutir, y sin articular con las demás provincias argentinas", sostuvo el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, en la Cumbre Federal de Logística, que se celebró en el marco del 65° aniversario del Consejo Federal de Inversiones (CFI).
Las reflexiones de Kicillof tuvieron lugar en el panel “Logística para el Desarrollo, diálogo con Gobernadores”, que compartió junto al gobernador de San Luis, Claudio Poggi. De la Cumbre Federal de Logística fueron parte los representantes de Catamarca, La Rioja, Santiago del Estero, Misiones, Tucumán, Formosa, Mendoza, Río Negro, Salta, Chubut, Jujuy y Tierra del Fuego, y todos escucharon al gobernador bonaerense cuando subrayó: "En el plan federal no vamos a presentar el capítulo bonaerense como si no existiera el país, porque si bien nuestro problema tiene un peso propio por su envergadura poblacional, demográfica, urbana, logística y productiva, ninguna provincia se salva sola, y por eso que hay que tener una mirada federal procedimental y metodológicamente".
El encuentro organizado por el CFI reunió a los principales actores del sistema logístico nacional, para que discutan iniciativas y delineen acciones con el objetivo de fomentar el desarrollo productivo en todo el país. Los ejes de intercambio fueron la planificación de la logística federal y urbana, los corredores internacionales, los nodos logísticos multimodales, los puertos provinciales, la hidrovía, el transporte de carga aéreo, el acceso al tren para el transporte de cargas y los caminos rurales.
Kicillof en su presentación tocó todos esos temas, pero antes advirtió que "si cada provincia se ocupa de sus propios problemas y sólo se mira su ombligo, no es probable que se salve, sino que se hunda". El gobernador sostuvo que los capítulos desarrollados por cada una de las provincias deben estar "enmarcados dentro de una mirada federal que tenga en cuenta las necesidades y los planes de las demás provincias argentinas", porque "tenemos un país federal donde ninguna provincia se salva sola", y "menos si el Gobierno nacional no se hace cargo de nada". Agregó que el resultado de la cumbre y el trabajo preparatorio de la misma deberían desembocar en una estrategia logística federal, pero que al mismo tiempo "no debe ser simplemente un conjunto o una colección de necesidades o propuestas de cada una de las provincias argentinas".
Planificar el desarrollo
Al igual que en el Foro Regional de Desarrollo Local para América Latina y el Caribe que se llevó a cabo el miércoles en Uruguay, Kicillof apuntó de lleno contra el Gobierno nacional y su deserción de los temas que lo incumben. Sostuvo que el hecho de que el CFI haya organizado una "cumbre federal" le parece "muy acertado", porque el país está en un momento donde la palabra ‘federalismo’ "resulta una verdadera bandera" y "un posicionamiento" para las provincias argentinas, por la situación "tan incómoda y tan excepcional" que tienen éstas en su vínculo con el Poder Ejecutivo nacional.
El gobernador bonaerense indicó que la provincia que él conduce "cree fervorosa y decididamente en la planificación del desarrollo", donde la logística "juega un papel fundamental". Apuntó Kicillof que al señalar esto está dando "una de las discusiones políticas más importantes que se está desenvolviendo en el país hoy", porque aunque en las redes sociales, la coyuntura y las discusiones "no se hable ni de federalismo, ni de planificación del desarrollo y menos todavía de logística", él cree que "lo importante está acá", y que lo que está en debate, en discusión y en disputa, "es pensar qué país queremos". "Hoy hay un debate que circula en torno a cuestiones que distraen sobre los problemas importantes que deberíamos estar tratando y discutiendo", agregó.
"Hoy tenemos un gobierno nacional que se desentiende de responsabilidades propias del Gobierno federal", remarcó Kicillof, e indicó que eso genera "varias dificultades" a la Provincia, "presentes pero también futuras". Dijo que Buenos Aires "no quiere ocuparse de sus problemas como si no hubiera Gobierno nacional", aunque la provincia que él conduce "tuvo que arreglarse con lo que tiene porque desde Nación nos abandonaron y desertaron".
"Reclamamos que el Gobierno nacional se haga cargo de lo que le corresponde, y si no les gusta, no les importa, o piensan otra cosa, que se dediquen a lo que se dedican, no soy despectivo ni respondo con chicanas, cuento el problema real que tenemos en la Provincia", añadió.
Retomando el eje de la integración, Kicillof sostuvo que "necesitamos que nuestras problemáticas se asuman como cuestiones de interés federal por parte del resto de las provincias", para que la estrategia bonaerense "no sea contraria, sino que haga sinergia y contribuya" a la estrategia de todas las provincias argentinas.
Buenos Aires concentra el 36 por ciento del PBI nacional, el 50 por ciento de la producción industrial, el 41 por ciento de la producción agropecuaria, 27 puertos comerciales, y moviliza el 39 por ciento de la carga de contenedores de todo el país. Por ese motivo, el gobernador bonaerense reafirmó: "No podemos ni vamos a pensar nuestra logística provincial divorciada, separada, autónoma y aislada del resto del país".
Canal Magdalena
Al enumerar los problemas estratégicos de Buenos Aires, que son "desafíos que tenemos que trazarnos en conjunto con todas las provincias", Kicillof enumeró el proyecto del Canal Magdalena, que incluye la Ruta Nacional 7, la Ruta Nacional 3 y la Ruta Nacional 8, pero que tiene obras paradas. La finalización de los accesos viales al puerto de La Plata, la conclusión de la Autopista Presidente Perón, la continuidad del proyecto del ferrocarril norpatagónico, y la recuperación de la infraestructura ferroviaria nacional y provincial, "para que de esta manera tengamos una logística integral que permita pensar en el desarrollo de la Provincia y de la Argentina", tal cual destacó el gobernador.
Sobre la obra del canal Magdalena, Kicillof indicó que se trata de "un proyecto fundamental que tenemos previsto llevar adelante a capa y espada, aunque se oponga el que se oponga", porque de concretarlo, se trataría de "un cambio que va a afectar a todas las provincias argentinas", y por eso "es importante desarrollarlo con una mirada federal". El Canal Magdalena permitiría no sólo darle una salida a los puertos bonaerenses, sino que permite "algo que es básico y que es una deuda que tenemos de más de 100 años, que es unir nuestras vías del litoral fluvial con el litoral marítimo", según Kicillof. Como cualquier barco que vaya desde el océano Atlántico a un puerto argentino, o viceversa, tiene que pasar por Montevideo y ser autorizado por las autoridades extranjeras, Kicillof aclaró que "no es un problema con el país extranjero en cuestión, sino que es un problema de soberanía argentina". "Hay que unir inmediatamente los ríos con el océano y eso es algo que hace el Canal Magdalena", subrayó.
Sostuvo que, por el posicionamiento geográfico de la Argentina, las rutas, los ferrocarriles, y los puertos bonaerenses "nos convierten en un nodo logístico nacional". Recordó que Buenos Aires forma parte del corredor bioceánico central de la Ruta 7, del corredor sur con la Ruta 3 y la Ruta 22, que une a la provincia con Chile, Brasil y Uruguay. "Tenemos un posicionamiento geográfico y estratégico, pero que necesitamos desarrollar y potenciar en favor de toda la Argentina, y eso es lo que venimos a poner a disposición de la estrategia federal".
Allí remarcó que "necesitaríamos que se involucre el Gobierno nacional, aunque sospechamos que no va a pasar". Dijo que su deserción afecta el futuro y el desarrollo del pueblo de la provincia de Buenos Aires, de las empresas, de las ciudades, y de la infraestructura. "La ausencia y el silencio del Gobierno nacional mete un ruido atronador", sintetizó el gobernador, y agregó: "Su ausencia no nos saca una carga o nos da más autonomía y libertad, nos pone en riesgo de desintegración, y nosotros no nos someteremos a ese programa de disolución nacional".