La evolución del mercado de alquileres de locales comerciales en Rosario compone otra vidriera en la que se refleja la recesión de la economía. Es que el precio de las locaciones volvió a aumentar el mes pasado, pero otra vez por debajo del ritmo inflacionario y, a la par, con el detalle de que ahora hay más unidades disponibles y en oferta porque la demanda no repunta. El músculo comercial, por este lado, parece haber desensillado hasta que aclare.
Un informe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso) esbozó esta foto de los alquileres comerciales en la ciudad, y se condice con la película que viene desarrollando al menos desde el inicio del gobierno de La Libertad Avanza. Los alquileres, en promedio, aumentaron 6 por ciento en agosto respecto de julio. Si bien la inflación general estuvo en el orden del 4 por ciento mensual, la comparación interanual arroja un incremento de 202% respecto del año pasado a esta fecha. Es decir, 61 puntos porcentuales por debajo de la inflación nacional en ese mismo período.
"Es curioso porque, si bien la oferta de locales en alquiler aumenta, también la evolución de los precios viene desacelerando respecto de la inflación, por debajo de la evolución de los precios de la economía general. Y esto también tiene que ver con la crisis: tal vez porque no hay tanta presión sobre la oferta, entonces los precios se descomprimen y los dueños no pueden incrementarlos de manera exorbitante porque les cuesta más conseguir inquilinos", explicó la economista Celina Calore, coordinadora del Ceso, en diálogo con Rosario/12.
El relevamiento del Ceso ubicó el promedio del alquiler comercial en Rosario en 370.000 pesos mensuales para los disponibles en agosto, 6 puntos más que en julio. Y en julio el precio mediano había dado $350.000, un incremento de 17% respecto de los valores de junio. Indicio de la desaceleración que comentó Calore.
Desagregados por dimensiones, sobre todo en el área central de la ciudad, los locales de hasta 50 metros cuadrados de superficie se alquilan en hasta $200.000, igual que el mes pasado, es decir que este segmento no registró aumento. Pero los locales de 51 a 200 m2 sí aumentaron 23% mensual y ahora se ofrecen en $490.000 de promedio.
Para superficies comerciales mayores a los 200 m2, el valor mediano es $1.200.000, lo que equivale a un aumento de 20% respecto de julio.
Pero al otro lado del mostrador está la clientela que justifica los movimientos del sector comercial de la ciudad. Y allí es conocida la retracción de su consumo. Datos de la Asociación Empresaria de Rosario y Came, indican que el comercio local solo en junio pasado achicó su actividad un 22% intermensual, y acumulaba una baja de 13% acumulado en el semestre.
Esta crisis de consumo por erosión del poder adquisitivo ciudadano provocó una alteración en el mercado de locaciones comerciales. La oferta de inmuebles para ser alquilados como comercio aumentó el mes pasado un 22% más que la cantidad de unidades disponibles en julio. Se desocuparon en mayor medida los locales grandes, de 200 m2 o más (39%), y en menor medida los más chicos de hasta 50 m2 (34,7%).
Según el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (Cocir), desde 2021 y hasta diciembre pasado el conjunto de locales comerciales deshabitados venía en disminución. Para fines del 2023, la tasa de vacancia era del 10% del mercado. Y para junio pasado, esa variable aumentó a 11,6%. Una proporción equivalente a unas 1.200 unidades en desuso.
Ante la consulta, Calore eligió no sacar conclusiones apresuradas sobre los números relevados por el Ceso porque este indicador es reciente y requiere de seguirlo observando para afirmar la tendencia que se va insinuando. Por caso, la oferta de alquileres que ahora aumentó, en la medición anterior había disminuido. "Sí se puede decir que tenemos un aumento en la oferta y entendemos que tiene que ver con el cierre de algunos locales comerciales en el centro, que es donde se ubica el mayor peso de la muestra", explicó. Por cierto, en Rosario hay registrados unos 10.000 locales comerciales, de los cuales el 77% se encuentra en el área central.
La economista colocó como encuadre del fenómeno "una coyuntura de caída de consumo, crisis de ingresos y, por lo tanto, comercios que ven caer su demanda y tienen que cerrar o relocalizarse, que es un rasgo que estuvimos viendo mucho, que nos comentaron varias veces. Todo en busca de mejores precios locativos y hasta para cambiar de zona", describió.
Por último, el informe menciona que el costo mediano de las expensas para estos inmuebles alquilados fue de $25.000 al mes, igual al 6% del cánon locativo promedio.