La vicepresidenta demócrata, Kamala Harris, tiene una estrecha ventaja sobre su rival republicano, Donald Trump, entre los votantes estadounidenses, según una encuesta del Wall Street Journal (WSJ) realizada tras la convención demócrata de este mes. El sondeo publicado un día después de que Harris diera su primera entrevista como candidata presidencial, muestra que un 48 por ciento de los votantes elegiría a la aspirante demócrata, frente al 47 por ciento del expresidente republicano, en una pregunta sobre cuál es preferido entre los dos.

Cuando se incluyen a más candidatos independientes, también Harris aventaja a Trump, con una diferencia de dos puntos, 47 contra 45 por ciento. Sin embargo esa ventaja entra dentro del margen de error de la encuesta de más o menos dos puntos y medio porcentuales. Se trata de la primera encuesta realizada por el WSJ desde abril del año pasado en la que un candidato demócrata aventaja al exmandatario. En el sondeo que el diario económico hizo a fines de julio, Trump tenía una ventaja de dos puntos sobre la vicepresidenta.

No todo son datos negativos para el partido republicano: cuando en la encuesta se preguntó a los votantes quién manejaría mejor la economía (un tema clave en estas elecciones), Trump consiguió una ventaja de ocho puntos sobre Harris y se hizo también con una ventaja de cinco puntos en una pregunta sobre quién manejaría mejor de la inflación. A finales del año pasado, Trump superaba a Biden por unos 20 puntos en ambos temas.

Con respecto a los vicepresidentes, el gobernador demócrata del estado de Minnesota, Tim Walz, consiguió una valoración más favorable que desfavorable, 46 a 40 por ciento, mientras que las opiniones desfavorables del compañero de fórmula de Trump, el senador de Ohio JD Vance, superaron a las opiniones positivas en 10 puntos, 50 a 40 por ciento.

La primera de Kamala

Los resultados de la encuesta se publicaron un día después de que Harris brindara su primera entrevista como candidata a la Casa Blanca, en la que se mostró firme con la inmigración. "Soy la única persona en esta contienda que realmente sirvió en un estado fronterizo como fiscal general para hacer cumplir nuestras leyes, y haría cumplir nuestras leyes como presidenta", afirmó en la entrevista transmitida por la CNN.

La migración ilegal es uno de los temas favoritos de Trump, quien acusa en sus actos de campaña a los migrantes de todos los males del país y a los demócratas de no hacer lo suficiente para resolverlo. "Tenemos leyes que deben cumplirse y ser aplicadas, las cuales abordan el problema de las personas que cruzan nuestra frontera ilegalmente y debería haber consecuencias", insistió la vicepresidenta.

La exfiscal aseguró que sus valores no cambiaron respecto a lo que pensaba cuando se presentó a las primarias en 2020. Pero cambió de parecer desde entonces en algunos temas como el "fracking", un método de extracción de hidrocarburos denunciado por los defensores del medio ambiente. "Podemos crecer y desarrollar una economía próspera basada en energías limpias sin prohibir el fracking", aseguró Harris en torno a un tema polémico, sobre todo en el estado de Pensilvania, donde el sector de los hidrocarburos provee numerosos empleos e ingresos.

Harris también se mostró abierta a contar con un republicano en su eventual administración en caso de ganar en las elecciones del 5 de noviembre. "Creo que sería beneficioso para el público estadounidense tener un miembro de mi gabinete que fuera republicano", señaló la vicepresidenta y agregó: "Pasé mi carrera invitando a la diversidad de opiniones. Creo que es importante que cuando se toman algunas de las decisiones más importantes haya personas en la mesa que tengan diferentes puntos de vista y diferentes experiencias".

Trump defiende los valores tradicionales

En un momento en el que le llueven las críticas por su posición ambigua sobre el derecho al aborto, Trump busca movilizar a sus bases sobre los valores de la familia. El magnate de 78 años fue este viernes el invitado de honor de la reunión anual en Washington de "Madres por la Libertad", una asociación conservadora fundada en 2021 que hace campaña por los derechos de los padres y se convirtió en estandarte de las "guerras culturales" en Estados Unidos, como los derechos LGBTQ+. La asociación se opone a abordar la identidad de género u orientación sexual en los colegios. 

Trump se jacta de haber permitido la cancelación en 2022 de la garantía constitucional del derecho al aborto mediante el nombramiento de tres jueces conservadores en la Corte Suprema. Pero las críticas de los demócratas y el apoyo de una mayoría de la opinión pública al derecho al aborto hacen que el expresidente cuide ahora mucho más lo que dice sobre el tema. Trump reveló el jueves la promesa de que, si llega a la Casa Blanca, los tratamientos de fecundación in vitro estarán subsidiados por el gobierno o las aseguradoras, algo que también sugieren los demócratas.