San Lorenzo volvió a ganar. Derrotó 2 a 1 a Platense en Vicente López y ratificó la levantada que tuvo luego de haberse quedado afuera de la Copa Libertadores. No fue una victoria holgada y exenta de angustias porque al Ciclón (13 puntos) no da para tanto. De hecho, un cabezazo de Mateo Pellegrino dio en el travesaño en el primer tiempo y otro se estrelló en el poste izquierdo en el segundo. O sea que Platense (15) bien pudo haber igualado y hasta ese resultado hubiera sido más adecuado.

Si el triunfo al final cayó para el lado azulgrana fue porque, con el partido 1 a 1 (Iván Leguizamón había abierto la cuenta de penal para el Ciclón y Pellegrino había igualado del mismo modo para los locales), a los 64 minutos desde fuera del área Elián Irala clavó un derechazo formidable al lado del poste derecho del arco de Cozzani.

De allí en más, Platense, que no ha podido construir una localía fuerte (lleva cuatro partidos sin ganar en su cancha de los cuales perdió tres) echó el resto. Entraron Schor y Baldasarra para abrir el juego por las puntas y Ronaldo Martínez para armar una doble punta de lanza con Pellegrino. Pero le faltaron luces al Calamar. Tampoco le sobraron al Ciclón, que se daba por muy conforme con el empate pero terminó ganando. Acaso porque los vientos en contra, han empezado a soplarle a favor.