Evita, Che, Diego, Lionel. Dos nombres de pila, un diminutivo y un apodo. Cuatro palabras que son mucho más que eso. Cuando alguien las evoca aparece una imaginería, un mundo simbólico, un universo vasto de significados. En el prólogo de Íconos argentinos (Fondo de Cultura Económica), Laura Malosetti Costa cuenta que en 2022 había publicado Retratos públicos, un libro sobre figuras como José Artigas, Simón Bolívar, José de San Martín, Juana Azurduy o Francisco de Miranda, y dice: "Este nuevo libro nace en las reflexiones finales de aquel respecto de la pregnancia de algunas personalidades que se proyectaron en el siglo xx desde Argentina saltando fronteras y convocando universos de valores y de sentidos que se vieron encarnados en sus figuras y trascendieron incluso sus biografías". 

La autora retoma, por ejemplo, la tradición de la religión cristiana bizantina para decir que "algo de eso persiste en el culto contemporáneo de la imagen, y en particular de ciertos retratos de los ídolos tanto políticos como deportivos".