El bajista Franco Fontanarrosa aporta un dato clave: en lo que va del año, el trío Christy Doran's Sound Fountain completará un total de 16 conciertos. "Es más de lo que tocamos con mi banda, La Mujer Barbuda... ¡y el baterista vive a seis cuadras de mi casa!", admite el músico rosarino, celebrando el efectivo esquema de trabajo logrado junto a los suizos Christy Doran (guitarra) y Lukas Mantel (batería). "Como nos separa un océano, cuando nos vemos tratamos de sacarle el mayor provecho posible al tiempo que estamos juntos", simplifica Fontanarrosa.

Y es un método que ha dado frutos: después de brindar cinco conciertos en Suiza y uno en Alemania --en el marco del European Jazz Legends--, el 3 de noviembre iniciaron un tour argentino que pasó por Santa Fe, Santiago del Estero, Humahuaca, Jujuy, Salta y Tucumán, y que esta noche tendrá su escala en Rosario: a las 21 el trío actuará en Teatro Pichincha (Vera Mujica 214), para partir mañana hacia Junín y cerrar la gira en Buenos Aires.

Entre medio, registraron un nuevo disco en el estudio Sonorámica de Traslasierra. "En Europa además grabamos un disco en vivo, con músicas distintas. Por suerte tenemos un montón de música, así que la verdad que trabajamos con mucha intensidad, pero da sus resultados", distingue el bajista, y admite: "Hoy, por sobre todo, lo que puedo decir es que somos tres amigos que la pasamos re bien. Eso se escucha y tiene muchísimo que ver con el resultado musical. Y, como siempre, el tiempo le va dando más aplomo a las cosas. Ya confiamos en el grupo, sabemos qué funciona bien".

- En este caso, además, el lenguaje musical debe haber fluido hacia un lugar de entendimiento natural.

- Sí, cada vez se va amalgamando más. Al principio creo que era más heterogéneo: se notaba qué aportaba Christy, qué Lukas y qué cosas aportaba yo. Ahora empieza a ser cada vez más como una mezcla más homogénea, es más un nosotros que la suma de lo que cada uno hace.

- ¿En qué resultó esa homogeneidad? ¿Dónde confluyeron esas individualidades?

- Creo que algo interesante que tiene el grupo es la energía. También tiene una cosa muy sutil, casi elegante, en el mejor sentido, que me parece que es algo que aportan más ellos: los suizos tienen esa forma de tocar. Y me parece interesante eso de que no suena parecido a nada, tiene una sonoridad bastante especial. Ahora que venimos de grabar en estudio, tuvimos la posibilidad de escuchar la música desde afuera, y noto un poco éso: tiene una cosa muy sutil y a su vez muy intensa. Más allá de hablar de algún género (que puede ser jazz, también rock, algo de música étnica que viene por el lado de Lukas, que le gusta mucho la música más de raíz), me parece que hay algo entre la energía, la sutileza y lo sofisticado, que se ha vuelto muy fuerte.