El reclamo que hizo el público en las cuatro tribunas del Coloso para que Sebastián Méndez deje de ser el entrenador de Newell’s luego del empate con Belgrano no fue escuchado por el presidente Ignacio Astore, a quien los hinchas también le pidieron su dimisión. La dirigencia rojinegra está aturdida ante la profundización de la crisis del primer equipo y pretende salir del delicado momento con la contratación de Ruben Capria como manager. “El futuro de Méndez está en manos del manager”, confió un colaborador de la dirigencia. El entrenador no resiste más una derrota y si bien sigue al frente del primer equipo en el parque Independencia ya le buscan reemplazo.

Lo que no quiere Astore es anticipar la llegada de Ricardo Lunari a la dirección técnica del primer equipo. El entrenador de la reserva viene de formar un equipo competitivo la pasada temporada, donde llegó a semifinales, y en la actualidad es cómodo puntero de la Zona 2 y el único que ganó todos los partidos tras finalizar sexta fecha. El sábado jugará el clásico en el Gigante. Astore le tiene reservado a Lunari su llegada a Primera para otro contexto.

Lo que hizo el presidente fue delegar la toma de decisiones a Capria, el flamante nuevo manager del club. Y el ex diez de Newell’s quiere ganar tiempo en la búsqueda de un entrenador. Porque más allá de que Capria le cofirmó a Méndez que sigue en el cargo, la ratificación es con validez a una fecha más. Newell’s visitará a Argentinos dentro de diez días. Una derrota en La Paternal no encontará argumentos a la dirigencia para sostener el entrenador. Y es en este tiempo donde el manager se dedica a considerar opciones de contratación para evitar tener que recurir a Lunari.

Pero la primera gestión de Capria fue por la negociación de Ian Glavinovich a Vasco da Gama. Los leprosos se desprenden del zaguero central a pesar de que es el único reemplazo para los titulares, Gustavo Velázquez y Saúl Salcedo, por el deseo del jugador de dejar la institución y las urgencia económicas del club, las cuales se expandieron a lo largo del año a consecuencia de los muy malos resultados del primer equipo, habilitaron las conversaciones. Glavinovich se irá a préstamo por un año por 600 mil dólares y con una opción de compra de 3 millones de dólares a favor de los brasileños por el 80 por ciento del pase. Glavinovih perdió la titulardad por algunos bajos rendimientos, con Mauricio Larriera como técnico, y el club contrató a Salcedo para su puesto. El juvenil quedó relegado al banco e hizo saber que se quiere ir a Brasil, lo que agilizó las negociaciones, las cuales iniciaron con una oferta de Vasco da Gama muy menor, de solo 200 mil dólares por el préstamo. 

Antes de la llegada de Capria el club ya tenía avanzada la salida de Julián Fernández a Sport Recife de Brasil. El volante se irá a préstamo hasta fin de año y se desvincula del club.