Legisladores opositores criticaron y repudiaron el veto total de Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria que buscaba recomponer el recorte del 8,1 por ciento que el propio Presidente le podó a las jubilaciones y pensiones sobre la inflación de enero. Desde distintas bancadas se pronunciaron a favor de insistir en el Congreso con la ratificación de la ley y el rechazo al veto de Milei para lo que necesita dos tercios de los presentes en cada una de las Cámaras, mientras que la Casa Rosada apuesta a la alianza con el PRO, la división de las bancadas de la UCR y la presión sobre gobernadores colaboracionistas para bloquear la resistencia opositora en un final aun abierto.

El Boletín Oficial publicó ayer lunes el decreto 782/24 con el veto total de Milei a la reforma de la movilidad jubilatoria --con la rúbrica de todo su gabinete--, porque “atenta contra el equilibrio fiscal” y fundamentado con cifras de dudosa procedencia.

Rechazos

La reacción de la oposición que impulsó la ley no tardó en hacerse sentir. “Hoy salió publicado en el Boletín Oficial el veto de Javier Milei en contra de las y los jubilados”, dice el texto del bloque de diputados de Unión por la Patria que publicó su presidente Germán Martínez en la red X. El posteo estaba acompañado de un flyer que destacaba que “con el veto de Milei los jubilados van a vivir peor” y un sello que los describía como “inhumano”.

“El Presidente vetó el aumento a los jubilados sancionado por ley en el Congreso. El gobierno les está negando un aumento de la mínima equivalente a 3 kilos de carne picada al mes. O 3 cajas de ibuprofeno al mes. O 4 kilos de yerba al mes. Ante un gobierno insensible, los argentinos no podemos darle la espalda a nuestros jubilados. Tenemos que insistir con la ley en defensa de nuestros adultos mayores”, expresó el presidente de la UCR, el senador Martín Lousteau.

"Como demócrata cristiano, frente al veto del Presidente de la Nación a la Ley de Movilidad Jubilatoria sancionada por ambas cámaras, vamos a votar por el rechazo de ese veto y a insistir en la aprobación de la ley”, publicó el diputado cordobés Juan Brügge, integrante de Encuentro Federal y sumó a su posteo los hashtags “jubilados”, “compromiso”, “dignidad”, “Movilidad” y “ley”.

“No trabajaron toda su vida para pasar hambre y sufrir tanta insensibilidad de un gobierno que les da la espalda. No nos da lo mismo. Los jubilados no pueden esperar”, publicó en las redes sociales con el hashtag “ConLosJubiladosNo”, el presidente de la Coalición Cívica y diputado nacional Maximiliano Ferraro.

Desde el Frente de Izquierda, la diputada Vanina Biasi (FIT-PO) sostuvo en X que “Mientras Milei concretó el veto a un incremento de 16 mil pesos para jubilados, quitó el 100% de cobertura a importantes medicamentos de PAMI e incrementó los costos del monotributo social, le otorgó un bono especial de 60 mil pesos para equiparar a las fuerzas armadas con los incrementos del Estado Nacional. Están claras las prioridades de ellos”, y convocó a una marcha para el miércoles frente al Congreso.

Las reacciones se sucedieron a lo largo de toda la jornada. “La recomposición de la jubilación que vetó Milei representa 0,45% del PBI. Lo que dejan de pagar los grandes contribuyentes de Bienes Personales es un 0,68%. Para el león de peluche es más fácil meterle la mano en el bolsillo a los jubilados que cobrarle impuestos a los ricos”, Posteó el diputado Hugo Yasky (UP). Su compañera de bancada, Victoria Tolosa Paz se pronunció en el mismo sentido: “Milei nos dice degenerados fiscales por pretender aumentarles el salario el 8.1% y llevarle la mínima a $317.000. Esto significa 0.4% del PBI, casi lo mismo que costó bajarle impuestos a los ricos con Bienes Personales y el Impuesto a las Transferencias de Inmuebles”. Para el diputado mendocino Adolfo Bermejo (UP) “el veto a esta ley que resultó del Congreso con la más amplia mayoría de votos de diputados y senadores es un enorme capricho personal que hace mucho daño. Esto demuestra un claro desprecio a las jubiladas y los jubilados. Lamentable”.

Por el radicalismo, salió al cruce el formoseño Fernando Carbajal: “Milei elige pelearse con lo que él dice que es la casta y las víctimas son los jubilados”, señaló al Diario Exprés. El diputado referenciado en el sector que encabeza Facundo Manes dijo sobre el veto que “no tiene que ver con las cuentas, sino con la prepotencia de Milei de que él puede hacer lo quiere”, y adelantó que desde la Cámara van a insistir con la iniciativa y van a rechazar la decisión del Presidente. "Estoy confiado en que el Congreso pueda conseguir los dos tercios, así los jubilados pasan a tener un 8% de aumento", agregó el diputado Martín Tetaz (UCR) en declaraciones a Radio Rivadavia. .

El diputado de Encuentro Federal, Oscar Agost Carreño consideró que “estamos ante un nuevo error del presidente, de no tomar caminos alternativos, no dialogar, y no encontrar una salida política en un tema tan delicado como es cuánto ganan los jubilados”. “De cada 100 pesos que ajustó Milei desde que llegó al poder, 40 fue con el cuero de los jubilados. Mientras los directores de YPF, del Gobierno y funcionarios de la AFIP ganan cifras estrambóticas”, insistió Agost Carreño en diálogo CNN Radio y aseguró que se deberá salir “a conseguir votos, y salir a buscar diputados que estén dispuestos a dar quórum” para revertir la decisión del Ejecutivo.

Escenario abierto

El viernes pasado por la tarde, Milei convocó a la Casa Rosada a legisladores de LLA y los aliados del PRO y del MID para pactar el acuerdo que permita bloquear que el grueso de la oposición consiga los dos tercios necesarios en el Congreso para rechazar el veto presidencial a la movilidad jubilatoria. Y por la noche firmó el decreto que se conoció ayer. En la Casa Rosada confían en que el veto no será rechazado y apuestan a la división del radicalismo y a la presión sobre los gobernadores colaboracionistas. 

Su mirada se posa especialmente sobre la Cámara de Diputados, donde la ley obtuvo la aprobación con dos tercios de los presentes, en medio de varias ausencias y abstenciones (160 votos a favor, 72 en contra, 8 abstenciones y 16 ausentes) Con asistencia perfecta de los 257 diputados, el Gobierno necesitaría 87 votos para bloquear el rechazo (15 mas de los que obtuvo con el voto en contra), mientras que la oposición necesita alcanzar 171 votos (11 mas de los que la aprobaron).

El oficialismo saca cuentas propias en un poroteo que se sigue y se controla desde Balcarce 50. Allí creen que tienen garantizados 82 de los 87 para el bloqueo: 37 diputados de LLA, los 37 del PRO, los 3 del MID, los 3 tucumanos que responden al gobernador peronista Osvaldo Jaldo y las 2 integrantes del bloque de Carolina Piparo. También apuestan a sumar a quienes se abstuvieron: los dos legisladores del bloque Producción y Trabajo que responden al gobernador de San Juan, Marcelo Orrego, y la tucumana de Creo, Paula Omodeo. Mientras apuran a los gobernadores radicales Alfredo Cornejo (Mendoza) y Gustavo Valdés (Corrientes) para que impongan la doctrina libertaria en el grueso del bloque de diputados de la UCR.

"Vamos a insistir con la ley en defensa de los adultos mayores porque ante un gobierno insensible, los argentinos no pueden darle la espalda a los jubilados", contrapuso Lousteau y se pronunció a favor que los bloques de diputados y senadores radicales que “impulsaron y defendieron la ley” insistan con el rechazo al veto presidencial. Una campaña en la que hasta ahora se alinean fundamentalmente los diputados de Evolución y de quienes se referencian en Manes. La pulseada podría terminar con el quiebre del bloque radical.

Desde la vereda de enfrente tienen sus propios números. En principio garantizar que refrenden su postura los diputados que votaron a favor de la nueva fórmula de movilidad: 97 de Unión por la Patria; 34 de la UCR; 13 de Hacemos Coalición Federal; 8 de Innovación Federal; 6 de la Coalición Cívica; los 2 de Por Santa Cruz y Osvaldo Llancafilo del MPN.

A ellos habría que sumar a los 5 diputados del FIT que se abstuvieron en aquella ocasión pero que confirmaron que votarán en contra del veto presidencial. Aunque la cifra tampoco alcanzaría en caso de asistencia perfecta en todas las bancas. Los opositores consideran que no todos aquellos a los que presione el gobierno estarán dispuestos a inmolarse con el veto presidencial. Pero también existe recelo entre los distintos bloques porque no todos pueden fidelizar al total de su propia tropa. El final aun está abierto.