La escena en los Tribunales de Buenos Aires se tornó caótica cuando la Policía Federal, bajo las órdenes del Ministerio de Seguridad liderado por Patricia Bullrich, reprimió con brutalidad a trabajadores judiciales que protestaban pacíficamente por una mejora salarial. Lo que comenzó como un banderazo organizado por la Unión de Empleados Judiciales de la Nación (UEJN) terminó en un violento enfrentamiento que dejó a varios heridos y decenas de personas detenidas.

Los manifestantes, que incluían a empleados judiciales y miembros de la Comisión Directiva de la UEJN, habían concluido su actividad en el cuarto piso del Palacio de Justicia y se disponían a retirarse cuando la represión se desató. "Estábamos cruzando la calle Talcahuano hacia Plaza Lavalle cuando nos empezaron a gasear y a golpear sin provocación alguna", relató uno de los empleados judiciales.

Julio Piumato, líder de la UEJN y Secretario de Derechos Humanos de la CGT, fue uno de los agredidos durante el incidente. "Esta violencia desmedida contra quienes simplemente reclaman un salario digno no tiene justificación", declaró en un comunicado emitido por el sindicato. En el texto, la UEJN condena enérgicamente la represión y asegura que procederán con las denuncias correspondientes, reafirmando su compromiso con la lucha por la dignidad laboral y la independencia judicial.

Las imágenes de la represión, que circularon rápidamente en redes sociales, muestran a efectivos deteniendo a manifestantes y utilizando gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a la multitud. Los trabajadores judiciales denunciaron que, además de las agresiones físicas, fueron objeto de amenazas y hostigamientos con armas largas.

La violencia no se limitó a la dispersión inicial. Cuando los heridos intentaron trasladarse a distintos centros de salud, la policía volvió a reprimirlos. "Una veintena de compañeros está siendo atendida en el Instituto de la Visión por lesiones en los ojos causadas por el gas pimienta", informaron desde la UEJN. Además, varias trabajadoras sufrieron quemaduras en la cara y el pecho debido a la exposición prolongada al gas.

La UEJN subrayó que no se dejará intimidar por la represión y que continuarán su lucha por salarios justos. "No nos van a someter utilizando la fuerza de quienes debieran garantizar nuestra seguridad", afirmaron en el comunicado. Además, recordaron que esta no es la primera vez que la gestión de Bullrich recurre a la violencia contra manifestantes, mencionando la represión ocurrida días antes contra jubilados en las inmediaciones del Congreso de la Nación.

La protesta de los trabajadores judiciales, que exige una recomposición salarial frente a la inflación y la eliminación de impuestos confiscatorios, se inscribe en un contexto de creciente malestar social en Argentina. La represión en Tribunales no solo dejó a numerosos heridos, sino que también puso en evidencia la tensa relación entre el gobierno y los sectores que reclaman por sus derechos.

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