El atleta argentino Brian Lionel Impellizzeri hizo historia en los Juegos Paralímpicos de París 2024 al ganar la medalla dorada en la final de salto en largo T37. Con una marca de 6,42 metros, Impellizzeri superó a sus ocho rivales y se consagró como el mejor en su categoría, consolidando su estatus de campeón del mundo en esta modalidad. El podio fue completado por el keniata Samson Opiyo, quien logró una distancia de 6,20 metros, y el brasileño Mateus Evangelista Cardoso, que alcanzó la misma marca que Opiyo.
"Estoy muy emocionado, vine a buscar esto. Trabajé muchos años, cambiando muchas cosas. Sé que puedo más. Mi cabeza juega muy bien, no sé cómo hago. Es algo que va generando la experiencia. No permití que la presión se me caiga encima", declaró el rosarino Impellizzeri en un mano a mano con TyC Sports. Con esta victoria,, la delegación argentina llegó a su segunda presea dorada en París 2024 y suma siete medallas en total.
Todas las demás fueron de bronce. Y la última la obtuvo a primera hora el pergaminense Alexis Chávez quien se quedó con la medalla del tercer puesto en los 400 metros T36. De 22 años de edad, Chávez terminó en la tercera posición, con un tiempo de 53,60 segundos, solo 3 centésimas por encima del japonés Takeru Matsumoto. La medalla de oro quedó en manos del australiano James Turner (51,54 segundos), mientras que la medalla de plata la obtuvo el neozelandés William Stedman.
La categoría T37 en la que Impellizzeri logró la medalla mayor es para los atletas que tienen el movimiento y la coordinación moderadamente limitados en un lado del cuerpo y es por eso que deben compensar la asimetría del cuerpo al principio de la carrera, la zancada y la distribución general de la potencia. En tanto que la categoría T36 en la que Chavez obtuvo el bronce es para atletas que sufren un deterioro en su coordinación, como la hiperponía, la ataxia, la atesosis y la parálisis cerebral.
En la jornada disputada en el Stade de France de París, Impellizzeri demostró su supremacía desde el principio y confirmó su favoritismo al llegar a la final con la mejor marca personal de la temporada (6,56 metros) y una histórica en su carrera de 6,67 metros. La ausencia del chino Guangxu Shang, actual poseedor del récord mundial y olímpico con 6,77 metros, conseguido en los Juegos de Río 2016, facilitó el camino para Impellizzeri, quien aprovechó la oportunidad para brillar y llevarse la medalla dorada.