El suizo Roger Federer podría quedar a 140 puntos de Rafael Nadal si gana el Masters de tenis de Londres, pero ayer dejó en claro que por el momento “no es realista” pensar en la posibilidad de quitarle el número uno del ranking al español. “Tengo 2.000 puntos que defender en Australia y él no. Así que ahí está el problema. Sé que él también tiene muchos puntos que defender en Australia (1.200), pero no tantos como yo”, comentó Federer tras su victoria ante el croata Marin Cilic.

“Por eso es que siempre digo que el número uno no es un objetivo realista en algunos aspectos. Es el máximo objetivo en el tenis en muchos sentidos, siempre lo ha sido para mí. Pero a esta edad, simplemente no lo puede ser”, afirmó el suizo de 36 años. 

Federer avanzó ayer a las semifinales tras ganar sus tres partidos del grupo. En caso de obtener el certamen por séptima vez, cerrará el año con 10.505 puntos, a solo 140 de los 10.645 de Nadal, quien se retiró lesionado del Masters tras perder su primer partido. Pero ayer insistió en que sería un error pensar en esa posibilidad. “Voy a cometer errores si comienzo a perseguirlo (el número uno). No estoy seguro si mi cuerpo me permitirá perseguir objetivos así. Además, si empiezo a pensar mucho y muy seguido en el uno, tal vez no consiga jugar como debería jugar. Tal vez me ponga más nervioso, más tenso”, continuó.

“Todavía estoy muy lejos en puntos de Rafa. Todavía debo ganar este torneo para estar realmente cerca. Apenas estoy en semifinales. Los grandes puntos vienen ahora. Por eso, mi foco está ahora en las semifinales”, dijo el ganador de 19 títulos de Grand Slam.

“Rafa ha sido mejor este año y merece estar donde está. Y estoy muy feliz por él, porque también ha tenido una temporada muy dura en 2016. Es fantástico para él”.

El suizo cerró con un balance perfecto su participación en la fase de grupos del Masters. El número dos del mundo, que ya estaba clasificado a semifinales como primero del Grupo Boris Becker, se impuso por 6-7 (5), 6-4 y 6-1 ante Cilic en una hora y 54 minutos. 

El croata, ya eliminado, jugó muy suelto y complicó a Federer con un festival de tiros ganadores en el inicio (36 en total, 32 en los dos primeros sets). El suizo pagó a su vez las oportunidades perdidas en el primer set, en el que no logró ningún quiebre en cuatro. Sin embargo, tras ganar un parejo segundo set con un quiebre en el décimo game, el suizo logró destrabar por completo el encuentro y en el tercer capítulo se impuso con autoridad. Tras el partido, Federer aseguró que intentó jugar relajado y disfrutar del inusual hecho de competir sin presión. “Intenté relajarme un poco. Pero quiero mantener el momento”, señaló. “Ahora, un último esfuerzo el fin de semana antes de las vacaciones”.

Con su victoria sobre el quinto del ranking, Federer extendió a 8-1 su récord personal ante Cilic, al que venció este año en la final de Wimbledon, y mejoró aún más sus espectaculares registros en el Masters. 

El suizo ganó seis veces el torneo, llegó a diez finales y alcanzó las semifinales en 14 de sus 15 participaciones. Además, suma 55 victorias por 12 derrotas. Todos récords en el Masters. 

Su rival mañana por un lugar en la final surgirá del vencedor del encuentro de hoy entre el belga David Goffin y el austríaco Dominic Thiem en el Grupo Pete Sampras. La zona ya tiene como ganador al búlgaro Grigor Dimitrov, que se medirá en la otra semifinal con el estadounidense Jack Sock, vencedor anoche por 6-4, 1-6 y 6-4 ante el alemán Alexander Zverev. Con estos emparejamientos, la final del Masters ya tiene asegurado un debutante, ya que tanto Dimitrov y Sock están jugando su primer Masters.