La mujer mendocina de 39 años que denunció por abuso sexual a los rugbiers franceses Hugo Auradou y Oscar Jegou ofreció nuevos detalles de las agresiones que sufrió en julio y el tratamiento de la causa que investiga ese delito. "Me trataron salvajemente, brutal, como a un pedazo de carne", dijo en diálogo con un medio francés.
La señal televisiva France 2 dio a conocer este martes en las redes sociales un adelanto de una entrevista que la víctima brindó al programa Envoyé Special, que se emitirá por completo el jueves 12 de septiembre. Mientras tanto, los deportistas de la selección de Rugby de Francia abordaron este jueves el vuelo de regreso a su país, luego de que la jueza mendocina de garantías, Eleonora Arena, hiciera lugar al pedido del fiscal Gonzalo Nazar.
Los jóvenes, de 21 años cada uno, se encontraban en Argentina bajo la mira de la Justicia desde julio, cuando se realizó la denuncia penal: primero, estuvieron en prisión preventiva en un penal de Mendoza; luego, obtuvieron la prisión domiciliaria en la provincia cuyana, y finalmente, se les otorgaron permisos para trasladarse a Buenos Aires, y luego, regresar a Francia. Las "condiciones" que le impuso la jueza es que se presentaran en el consulado argentino cada vez que lo requiera la justicia, que fijaran un domicilio legal y virtual, y que comparecieran en caso de ser solicitada su presencia en Mendoza.
La víctima acusa a los franceses de haberla golpeado y violado en repetidas ocasiones el pasado 7 de julio, en la habitación del Diplomatic Hotel de Mendoza que ambos ocupaban, luego de conocerse en un bar en el que la selección de Rugby celebraba haber derrotado a los Pumas en un amistoso jugado en el Estadio Malvinas Argentinas de Mendoza. Los rugbiers fueron imputados el 17 de julio por el delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos personas", cargos que van de 8 a 20 años de prisión.
Qué dijo la denunciante de los rugbiers franceses
En el adelanto audiovisual de poco más de 7 minutos, el programa francés retoma los detalles del episodio que se investiga en la Justicia de Mendoza a raíz de la denuncia de la mujer. En tanto, la propia víctima explica con sus palabras lo que afirma haber vivido la madrugada del domingo 7 de julio:
"(Hugo Araudou) me dice 'vamos a tomar algo a mi hotel', le digo que sí, que vamos a seguir tomando, porque ya habíamos tomado bastante... Pero al entrar a la habitación (del hotel), constato de que no había bebidas alcohólicas ni nada", explica la mujer a la que solo se le puede escuchar la voz.
Soledad describió haber ido al baño del cuarto inmediatamente, e indicó que desde ese rincón, le pide que la deje ir: "Please, I'm going to my house (Por favor, me voy a mi casa)".
"(Hugo) me hace con la cabeza "no, no, no", entonces me agarra del cuero cabelludo. Arrastrándome hasta la cama, me empieza a desvestir como a un animal, y me tira a la cama ya desvestida, y me empieza a ahorcar, a tal punto de dejarme sin oxígeno. Pude reaccionar pegándole una cachetada, y en vez de parar, lo enfureció más", contó.
Pero la pesadilla no terminaba allí. La mujer contó que luego entró "el rubio", es decir, Oscar Jegou, quien pensaba que acudía a su auxilio. "Yo pensaba que era alguien que escuchó mi voz gritando... En vez de solidarizarse conmigo, fue abusar él también de mí", lamentó.
"Le empecé a gritar "No, no please no. I'm going to my house (No, por favor, no. Me voy a mi casa). Pero no le importó nada mi pedido de auxilio. A este punto yo ya estaba difónica. No pude gritar porque tenía las cuerdas vocales comprometidas. Me abusa sexualmente el rubio, una vez, sin protección profiláctica", aseveró Soledad.
"Lo más aberrante es que no sé cuál de los dos me pegó la trompada en el ojo", señaló la joven.
Además, cuestionó el juicio que se lleva adelante, al señalar que la Justicia la sienta en el banquillo acusatorio: "Me dicen: "Qué, ¿estaba la puerta abierta y no pudiste salir?"". Pero ella responde: "No pude salir, porque Hugo venía siempre detrás mío".
"Yo me quedé rendida después de tanta golpiza que me dieron. Si intentaba algo, no sé si hoy estaría aquí en vida. Me trataron salvajemente, brutal, como a un pedazo de carne", ratificó.
El informe audiovisual del canal frances devela además imágenes de las secuelas de la golpiza y la agresión sexual que sufrió Soledad, mientras ella describe a qué corresponde cada moretón o daño: "Para mí son gravísimas las lesiones que se han producido. Tengo hematomas en los ojos, en la cara interna y externa de las piernas, inflamación aguda en las cuerdas vocales, edemas en la glotis, tuve edemas en el maxilar izquierdo, un puñetazo en el ojo, mordeduras en la espalda, rasguños en la espalda".
En tanto, Soledad explicó que la defensa de los rugbiers intenta alegar que los moretones que tiene la mujer en el cuerpo podrían ser producidos por una enfermedad que ella padecería conocida como síndrome de Von Willebrand. "Vamos a presentar una perito para que haga esa evaluación, porque es imposible que mi enfermedad provoque eso", puntualizó.
Por último, la denunciante apuntó directamente contra la Federación de Rugby de Francia, al señalar que pese a la grave denuncia, está "reclamando a sus jugadores" por que "los necesita", y disparó: "Están poniendo tanta plata en este juicio para sacarlos y dejarlos como héroes que no hicieron nada. Me parece que en Francia son unos corruptos por el trato que me están realizando".