El Vaticano confirmó finalmente que Carlo Acutis, el primer millennial en ser beatificado por la Iglesia católica, no será canonizado este año (en contraste con lo que anunció en mayo). El lunes 1º de julio, el Papa Francisco presidió el Consistorio Ordinario Público para la canonización de algunos beatos, y decretó que 14 de ellos sean declarados santos por la institución que preside el próximo 20 de octubre. Amén de revelar los nombres de quienes serán llevados a los altares, la Oficina de Prensa de la Santa Sede dejó en suspenso el desenlace del "Influencer de Dios". El comunicado se limitó a informar: "El beato Carlo Acutis será inscrito en la Lista de los Santos en una fecha por determinar".

Según el sitio web Vatican News, la canonización del joven italiano, quien murió 18 años atrás, a la edad de 15 años, podría suceder en el Jubileo Ordinario de la Esperanza, a celebrarse entre el 24 de diciembre de 2024 y el 6 de enero de 2025. En la Iglesia católica, el jubileo de carácter ordinario es una dispensa que se convoca para celebrar de manera especial la Natividad. Se lleva a cabo cada 25 años, y a quienes participen el Papa les concede la indulgencia plenaria. En esta ocasión, el tema es "Peregrinos de la esperanza", con el que se invita a los fieles a recuperar la fe, tras el sufrimiento que legaron en los últimos tiempos el flagelo de las guerras, los efectos de la pandemia de COVID-19 y la crisis del cambio climático.

La decisión dilata una de las mejores noticias que brindó la Iglesia católica en los últimos tiempos, sobre todo a los jóvenes, en una época donde la institución experimenta una imparable fuga de creyentes. Aparte de haber perdido poder, influencia e imagen moral. Y es que Carlo podría ser el primer santo millennial. Pese a que nació en Londres, su familia es originaria de la región italiana de Lombardía. No eran practicantes, pero él desarrolló una gran devoción por la Eucaristía y la Virgen María. Al punto de que se refería a ella como "la única mujer" de su vida. Es por eso que puso su interés en las apariciones de la Virgen de Lourdes y de Nuestra Señora de Fátima, al igual que en el estudio de varios santos.

Otro de los apodos del beato es "el Apóstol de Internet". De hecho, existe una imagen suya, que seguramente devenga en estampita, en la que se lo ve portando una laptop con el Corpus Christi resaltando en la pantalla. Acutis era un programador de informática aficionado (sus conocimientos abarcaban edición de video, creación de sitios web y periódicos digitales) que se dio a conocer por documentar milagros eucarísticos​ y apariciones marianas aprobadas. Esa información la subía a una página web, aún activa (www.carloacutis.com), por lo que usaba la tecnología en pro de la fe católica. En el sitio, la introducción expresa: "Estar siempre unido a Jesús, ése es mi proyecto de vida".

Pionero en el uso de plataformas digitales para la difusión de contenido religioso, tras dos años de investigación y viajes este siervo de Dios compiló 136 milagros reconocidos por la Iglesia católica alrededor del mundo. Lo que expuso a través de fotos y descripciones, a los 14 años. La propuesta comenzó en su web, pero se materializó en varios países. La muestra incluso llegó a Argentina en 2021. Previo a ese raid, a los 12 años contactó a la Iglesia argentina para ahondar en el Milagro Eucarístico de la parroquia porteña de Santa María (las manifestaciones de una hostia sangrante acontecieron en 1992, 1994 y 1996, lo que llevó al análisis científico, en 1999, y se verificó que era tejido de corazón humano vivo).

Sin embargo, una leucemia del tipo M3, en su grado más agresivo, lo mató en cuestión de días. Este fan del saxo, los videojuegos y el fútbol entró en el hospital San Gerardo, de la ciudad italiana de Monza, en el alba de octubre de 2006. Y no salió de ahí. Es más: se lo vaticinó a su madre, apenas lo ingresaron. Tras conocer el resultado de los análisis, le ofrendó su enfermedad "al Señor, al Papa y a la Iglesia". Pidió la extremaunción, y falleció el 12 de octubre de 2006. A su funeral asistieron niños, mendigos, inmigrantes y gente sin hogar. Esto se debió a su trabajo social, del que su familia no tenía conocimiento. Incluso su fe ocasionó que las instituciones religiosas comprendieran la importancia de la tecnología en la propagación religiosa.

Aunque en ese momento vivía en Milán, el "Ciberapóstol de la Eucaristía", otro de sus álter egos, fue enterrado en el Santuario del Despojo (ubicado en Asís, urbe de la provincia italiana de Perugia), a raíz de su admiración por San Francisco de Asís. Lo pidió él mismo, sin saber que enfermaría, de lo que da constancia un video grabado tres meses antes del diagnóstico. Vale destacar que todo aquel que se considere cristiano tiene posibilidad de transformarse en santo. Para lograrlo, debe acreditar dos milagros. Es lo que pide la Iglesia católica. Y a Carlo (ya existen dos películas suyas: El cielo no puede esperar y El latido del cielo) se le autenticaron un par de casos. Ambos registrados, curiosamente, en Latinoamérica.

El primero se documentó en Brasil, en 2010. Un niño de siete años, que padecía un raro trastorno pancreático, sin cura para los médicos, sanó tras tener contacto con un trozo de remera que pertenecía a Carlo. Esto ocasionó que en 2013 comenzara su proceso de canonización. En 2020 fue declarado beato, pero el hecho que derivó en su santificación se produjo en 2022. Se le adjudica a una chica costarricense, de 21 años, quien sufrió un accidente craneoencefálico. Luego de la operación, la madre viajó en peregrinación a Asís, a la tumba del entonces joven beato, donde dejó una carta escrita. Días más tarde, su hija no sólo recuperó órdenes motoras, sino que dejó de tener rastros de la hemorragia.

Entre un milagro y otro, en 2019 el cuerpo de Carlo fue exhumado. Sin embargo, a pesar de la revolución tecnológica e informativa que experimenta la humanidad, esto estuvo permeado por los mitos. Cuando abrieron su tumba, la prensa italiana publicó que su cuerpo se mantenía incorrupto. Medía 1,82, pesaba 70 kilos, conservaba su pelo negro rizado y la piel estaba un poco más oscura. Su madre fue, en teoría, la que lo vio. Mientras que su padre no quiso mirar. El rector del Santuario del Despojo en Asís, Padre Carlos Acácio Gonçalves Ferreira, explicó que el cuerpo no se encontraba intacto, pero sí íntegro. Es por eso que se hicieron trabajos sobre su rostro, para que se pudiera ver a un santo vestido con jean, zapatillas y buzo.

El Obispo Domenico Sorrentino, por su parte, afirmó que el cuerpo fue tratado con técnicas de conservación e integración usadas para exponer con dignidad a los beatos y santos (se reconstruyó su cara con una máscara de silicona). En 2020, la tumba del "Influencer de Dios", en el Santuario del Despojo, se abrió por pocos días. Dos años más tarde, se anunció su reapertura, esta vez de forma permanente. Se puede ver su cuerpo reposando en una urna de vidrio, al tiempo que su corazón descansa en un relicario. "Queríamos donar sus órganos, pero no fue posible. Estaban comprometidos por la enfermedad", dijo Antonia Salazano, su madre. "En una bella paradoja, el corazón quedó perfecto y estará en custodia en la basílica papal de San Francisco de Asís."

Pese a la postergación, la madre del internauta italiano, que afirmó que su hijo "era la respuesta luminosa al lado oscuro de la web", manifestó su alegría al conocer que el Papa decidió que Carlo sea santificado en el Jubileo de 2025. "Tiene muchos devotos esparcidos por todo el mundo, y la canonización permitirá ahora que el culto sea universal", caviló. "Esto nos dará la posibilidad de llevar a cabo otras iniciativas en honor a él, como la construcción de una iglesia o la dedicación de algunas capillas." En este camino hacia la santidad, Antonia fue testigo de la manera en que su vástago se tornó en un signo de esperanza: "Vivió lo que viven los jóvenes: alegrías, miedos y esperanzas. Creo que su mensaje es ayudarnos a entender que tenemos lo esencial ante nuestros ojos".


  • Encontrá más notas del NO acá, o suscribite acá abajo ↓ para recibir gratis en tu email todos los artículos, la agenda de shows, música nueva y nuestros recomendados.