Inaugurado el 21 de junio del 2023 el Museo de la Memoria Afropanameña se encuentra en un edificio de gran relevancia histórica. La Real Aduana de Portobelo, construida en el siglo XVII por los colonizadores españoles. Este lugar fue durante mucho tiempo un centro clave del comercio colonial para el tráfico de personas esclavizadas. Tras ser abandonada en 1882, la aduana sufrió solo restauraciones menores hasta que recientemente se ejecutó un ambicioso proyecto de renovación valorado en 3.7 millones de dólares.
El museo, que también se alza sobre un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1980, busca relatar no solo la historia de la esclavitud en la región, sino también celebrar las tradiciones culturales que surgieron como resistencia a la colonia. Durante la ceremonia de inauguración, Alexander Leicht, Director de la Oficina Multisectorial Regional de la UNESCO, destacó que Portobelo fue un puerto significativo en la historia de la esclavitud, calificando el lugar como un símbolo de resistencia y resiliencia de la comunidad afrodescendiente.
Uno de los aspectos más destacados de este proyecto ha sido la activa participación de la comunidad local en la restauración del edificio. La mayor parte de la mano de obra contratada provino de Portobelo y la provincia de Colón, lo que no solo ha generado empleo, sino también un fuerte sentido de pertenencia entre los habitantes. La restauración del edificio ha dado a la comunidad la oportunidad de reconectar con su pasado y ser parte del proceso de recuperación de su patrimonio cultural.
El Museo de la Memoria Afropanameña ofrece a sus visitantes una visión profunda de la historia y el legado de la comunidad afrodescendiente en Panamá, desde la esclavitud hasta su rol invaluable en la contrucción del país. Es un espacio que invita a la reflexión, al orgullo y a la reconexión con una herencia que ha moldeado la identidad panameña.
Es una parada obligatoria en el corazón de Portobelo, que atrae tanto a locales como a turistas deseosos de conocer y celebrar el legado afrodescendiente. Este espacio no solo relata la historia de Panamá, sino que también simboliza la herencia de la resistencia cimarrona, inspirando una visión de un futuro antirracista.