Luego de movilizar hasta el rectorado, la comunidad educativa de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) se prepara para sumar su columna a las manifestaciones que el próximo miércoles pedirán al Congreso en apoyo a los jubilados y en repudio a la acción represiva de la semana pasada. 

Allí sumarán sus reclamos a una acción que se prevé transversal y que en el caso de los docentes pide por la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario que iba a tratarse el jueves, pero el oficialismo logró truncar la sesión. 

La movilización de esta semana estuvo motorizada por el Frente Gremial de la UNLP que integran por la Asociación de Docentes de la Universidad La Plata (Adulp), la Federación Universitaria de La Plata (FULP) y la Asociación de Trabajadores de la Universidad Nacional de La Plata (Atulp).

El reclamo por la emergencia universitaria viene haciéndose sentir en casi todas las universidades del país, aunque en la UNLP logró una nivel de cohesión política interna que se demuestra en las acciones que se generan semana a semana y que el jueves reunió a miles de personas entre docentes, estudiantes, trabajadores, vecinos y autoridades de la universidad para movilizar por las calles de la capital bonaerense.

Según pudo saber Buenos Aires/12, además de sumarse a la marcha del próximo miércoles no se descarta acciones similares por parte del frente gremial que también analiza la posibilidad de convocar, junto con el grueso de las universidades del país, una marcha nacional con características similares a las de la movilización de comienzos de año.

Entre los reclamos del jueves también se destacó el pedido por aumento salarial, y la apertura de las discusiones paritarias libres. En medio de un fuerte atraso salarial producto de la disparada de precios y la caída del poder adquisitivo de los salarias, en la última reunión paritaria realizada en el Palacio Sarmiento el Gobierno propuso un aumento de 3 por ciento para agosto y 2 por ciento para septiembre.

Los estudiantes sumaron la exigencia de un aumento en las becas Progresar y políticas para garantizar el acceso y la permanencia. “Sin salarios dignos y políticas de permanencia no hay trabajadores ni estudiantes. Sin trabajadores ni estudiantes no hay Universidad Pública y sin Universidad no hay futuro”, advertía uno de los documentos de la convocatoria.

El proyecto de Ley de Financiamiento ya cuenta con media sanción de la Cámara Baja y  plantea que el Poder Ejecutivo debe actualizar las partidas presupuestarias de las Universidades al 1 de enero de 2024 y hasta el 31 de diciembre de 2024 destinada a gastos de funcionamiento, de forma bimestral y en función del Indice de Precios al Consumidor (IPC).

También establece la recomposición salarial de docentes y no docentes a partir del 1 de diciembre de 2023 y hasta el 31 de diciembre de 2024, de forma mensual y conforme a la inflación acumulada informada por el Indec. 

Más allá de las acciones inmediatas, se espera que en las próximas semanas la falta de respuestas por parte del Gobierno nacional, que ya advirtió que vetará la ley de financiamiento en caso de que el Congreso termine por aprobarla, empujen a los docentes y los trabajadores a convocar a un paro que podría extenderse por más de 48 horas.  

Vale recordar que el plenario de la CONADU Histórica ya definió llevar al Frente Sindical de Universidades Nacionales, la propuesta de coordinar un paro nacional de 72 horas con acciones visibilización para esta semana.