Tras la eliminación de Talleres de Córdoba en los octavos de final de la Copa Argentina por penales contra Boca Juniors, se produjo un escándalo en la zona de los vestuarios, luego de que presidente del equipo perdedor, Andrés Fassi, reveló que tanto él, como el vicepresidente, Hugo Gatti, habían sido agredidos por el árbitro Andrés Merlos.
La secuencia ocurrió minutos después del final del partido, cuando los dirigentes abandonaron el palco y se dirigieron hacia los vestuarios. Una vez allí, Merlos iba acompañado del primer asistente Diego Bonfá, el segundo asistente Pablo Gualteri y el cuarto árbitro Felipe Viola, cuando comenzó una discusión entre Fassi y Merlos.
"Le pregunté por qué seguía perjudicando a Talleres, porque no es la primera vez que este árbitro perjudica a Talleres, la situación del gol es inexplicable", señaló el dirigente de Talleres al hacer alusión al primer gol del "Xeneize". En esa jugada, la pelota había cruzado la línea de meta y era saque de arco para el conjunto "tallarín", por lo que la conquista de Boca tenía que haber sido anulada.
Fassi aseguró a la prensa que el árbitro reaccionó de forma violenta. "Empezó a gritar y me dice: 'Si querés hablar, te invito para que vengas'. Yo le dije: 'Con todo gusto, claro que vine a hablar'", relató el dirigente de la entidad cordobesa.
Asimismo, añadió: "Se mete a su camarín, él quería agredirme pero lo frenaban los banderas (jueces de línea). Se ve que se les soltó, vino y me agredió. Me pegó una trompada a mí y le pega una patada al vicepresidente, Hugo Gatti. Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias. Va a tener una denuncia penal".
Merlos contraataca
El árbitro no se quedó callado y reveló Fassi ingresó al vestuario acompañado con dos hombres con armas de fuego para amenazarlo.
"Es lamentable, triste y doloroso lo que pasó. No hay explicación para lo que hace Fassi, tiene una impunidad increíble. Entraron dos personas a mi vestuario con un arma de fuego, faltó que apriete el gatillo", disparó el juez en una entrevista con DSports Radio. "Me empezaron a gritar y me decían que me iban a matar. Uno de los custodios mete la mano en el bolsillo y veo la culata de un arma", aseguró.
Merlos, que realizó una denuncia penal de manera online, desmintió haberle pegado una trompada al presidente de la T. "No sé por qué Fassi dice que yo le pegué, si él era el sacado. Yo tenía miedo, pero estaba tranquilo. Si yo le pegué una piña en un pómulo, ¿por qué no lo mostraron?", se preguntó el árbitro, y añadió: "Lo único que le falta a la historia con Fassi es que este hombre que entró con él al vestuario, saque el arma y meta el dedo en el gatillo. Esto no puede pasar en nuestro fútbol, él ya recibió sanciones por malos tratos que tuvo conmigo", concluyó.