El diputado nacional de Unión por la Patria Carlos Heller aseguró que por la 750 el Gobierno de Javier Milei profundizará los recortes en todos los sectores del Estado de manera brutal “mientras los ajustados se la aguanten”. En otras palabras, afirmó que el plan recesivo del Gobierno no tiene más límite que la tolerancia del pueblo.
En este punto, afirmó que la cuerda se tensiona en las provincias y en los sectores más vulnerables, donde está recae la mayor parte del peso del ajuste, y puso como ejemplo el Cordobazo, un momento donde la tolerancia social explotó por los aires y marcó el principio del fin para el Gobierno militar de Juan Carlos Onganía.
Así lo afirmó al hablar sobre la votación en el Congreso para voltear el veto presidencial que suspende los aumentos a las jubilaciones y destacar el amplio consenso que se logró: “Ahora, el Gobierno juega también, y juega pesado, y aprieta. Y pone en tensión los recursos para las provincias”.
“El grueso del ajuste se hace en los jubilados que viven en los territorios. En la obra pública, que se hace en las provincias, en el territorio. En los subsidios y las transferencias a las provincias. Las provincias están sometidas a un apriete fenomenal y eso funciona como una herramienta de presión a cambio de votos”, denunció.
Esto hace que se ponga en tensión un modelo económico que no parece tener fin: “El ajuste interminable genera caída de la actividad económica y cuando eso sucede es normal que la inflación baje, porque la falta de absoluta demanda hace que los precios suban menos. Es decir, que es una victoria extraña. Las cosas aumentan menos, pero la gente tiene cada vez menos posibilidades de comparar”.
“Ellos siguen adelante con su plan, que va a tener un nuevo capítulo en el Presupuesto. Que se va a hacer sobre la base de que se va a gastar sobre lo que se tiene. Es decir, que no se va a buscar la forma de cubrir el gasto. Ellos van a decir ‘con esto hay que arreglarse’”, añadió en este punto.
Finalmente, lanzó: “En ese marco seguirán sufriendo los sectores más débiles, los que tienen menos capacidad de reacción. Y seguirá creciendo la conflictividad social asumiendo que mientras los ajustados se la aguanten, el ajuste no tiene límite. Fue así a lo largo de la historia”.
Por eso, pidió mirar hacia adelante con espíritu dialoguista: “Si mirás la foto del Cordobazo podés pensar que terminó con una represión enorme, pero unos meses después el ministro de Economía se tuvo que ir y al poco tiempo tuvieron que llamar a elecciones. Esta es la dinámica de la política. No hay que instalar visiones pesimistas. Hay que trabajar en consensos y confiar en que cada día haya más gente que lo entienda”.