El auge del humano 3     6 puntos 

Argentina/Portugal/Taiwan/Holanda/Brasil/China, 2023 

Dirección: Eduardo “Teddy” Williams 

Duración: 117 minutos 

Intérpretes: Meera Nadarasa, Sharika Navamani, Livia Silvano, Abel Navarro, Ri Ri Yang, Hsu Bo-kai, Chen Wei-siang, Lucas Manuyama. 

Estreno en Sala Lugones, Corrientes 1530.

El nuevo trabajo de Eduardo Williams, El auge del humano 3, define el cine que realiza este joven director argentino. Con un fuerte dispositivo narrativo que implica no pocos riesgos y a partir de una trama simple, la película -a la que resulta difícil clasificar, incluso en categorías muy básicas, como establecer si se trata de un documental o una ficción- ofrece una experiencia cinematográfica basada en un complejo juego de alteración sensorial. Su registro del mundo resulta perturbador, no porque represente un desafío de orden ético o moral, que es la forma más sencilla (y cómoda) de perturbar, sino porque tuerce casi todas las convenciones del cine y de la física.

La película sigue a una serie de personajes, todos en la etapa final de la adolescencia, quienes parecen estar vinculados entre sí por distintas formas de la amistad. Pero a este argumento, que de tan sencillo puede resumirse en pocas líneas, se le debe agregar una serie de elementos que convierten al asunto en un laberinto a cielo abierto que tiene el tamaño del planeta entero. Porque estos chicos provienen de distintas partes del mundo, todas ellas de geolocalización imprecisa: algún lugar del sudeste asiático, algún lugar del subcontinente indio, algún lugar de la Sudamérica andina. Las imágenes los retratan, primero de forma alternada, mostrando que se trata de grupos separados, para de a poco comenzar a cruzarlos en los distintos escenarios y terminar todos juntos, aunque no se sabe dónde.

En ese devenir, tanto el registro sonoro como el visual, e incluso el formato narrativo, se encuentran subvertidos a partir de utilizar los diferentes elementos técnicos de los que se vale el cine de maneras radicalmente ajenas al canon clásico. Usando lentes deformantes, grandes angulares muchas veces intervenidas para alterar aún más las imágenes, la cámara deambula como si se tratara de un personaje más. A veces fluye junto con los personajes, pero otras opta por tomar caminos divergentes para retratar distintos espacios y paisajes. Por el contrario, el sonido siempre está atento a las conversaciones del grupo, aunque muchas veces no coinciden con las que mantienen los personajes que aparecen en pantalla, sino que pertenecen a otros, momentáneamente fuera de campo, permitiendo que lo ausente siga presente.

En contra de lo que puede sugerir todo lo anterior, no sería correcto definir a El auge del humano 3 como una película confusa, sino como una que busca de manera deliberada sacar al espectador del modelo perceptivo en el que se siente más cómodo. Un desafío. El montaje clásico; la fotografía como registro fiel de lo real; la concordancia estricta entre lo que se ve y lo que se oye; la cronología lineal; la construcción de los diálogos respetando estructuras lógicas. Nada de eso se cumple en el tercer largometraje de Williams. Ni siquiera la ley de la gravedad queda a salvo de este barajar y dar de nuevo sensorial.

Pero incluso siendo radical, el cine de Williams tiene sus precursores. Hay vestigios del Lisandro Alonso de las primeras películas, presente en ese registro que parece fluir atado a los protagonistas. Está Raúl Perrone y su pasión tanto por los retratos oblicuos de una juventud siempre en tránsito, como por los dispositivos formales de ruptura. Se percibe la influencia de los juegos ópticos de Carlos Reygadas y su habilidad para hacer que lo fantástico se cuele en el relato de forma desembozada. Y si bien todo eso está ahí, también flota durante toda la película la sensación de que se trata de una búsqueda demasiado planificada, artificial, que revela la presencia de un director detrás de cada decisión. Una leve (pero aún así notoria) falta de naturalidad, que de ningún modo se percibía ni en Los muertos, ni en P3ND3JO5, ni en Post Tenebras Lux. Tal vez eso también forme parte de esta búsqueda.