El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) concretó el desalojo y traslado de la tradicional feria de Vuelta de Rocha del barrio de La Boca en horas de la madrugada de este miércoles. El traslado había sido frenado semanas atrás por una cautelar pero el Gobierno apeló y la Justicia autorizó el desplazamiento. Los más de cien feriantes rechazan la reubicación y mantienen una "resistencia pacífica". Apelarán el fallo para intentar retornar al lugar que ocupaban desde hace más de cuarenta años.
"Antes de la una de la madrugada y en menos de dos horas movieron toda la feria", contó a Página 12 Mariana, una de las trabajadoras de las ferias Vuelta de Rocha I y II, ubicadas hasta el martes en el entorno de Caminito y la Plazoleta de los Suspiros, a metros del Riachuelo. El operativo implicó el desarme de todos los puestos del lugar y su traslado a la Plazoleta de Los Bomberos.
Así se concretó lo que había oficializado a principios de agosto la Dirección General de Permisos y Ferias del Ministerio. A través de una disposición publicada en el Boletín Oficial, la Dirección establecía un plazo de cinco días para efectivizar la reubicación a la plazoleta ubicada en el cruce de las calles Garibaldi y General Aráoz de Lamadrid, junto a las vías del tren de cargas, en la otra punta de Caminito y a cien metros de Vuelta de Rocha, donde circula la mayor parte de los turistas.
Hasta ahora, sin embargo, el Ministerio no había podido hacer efectivo el traslado por orden de la Justicia. Antes de que se cumpliera el plazo de cinco días, el juez Ignacio Marconi, del Juzgado N°11 en lo Contencioso, Administrativo y Tributario, hizo lugar a un amparo presentado por los feriantes y dictó una medida precautelar que frenaba la disposición. Eso cambió este lunes, cuando el mismo juzgado emitió una resolución para revocar la medida. Allí, el juez argumentó que "la nueva ubicación se encuentra a tan solo una cuadra de distancia" y que el Ministerio actúa en "uso de sus atribuciones legales".