Con el respaldo que le da su condición de presidente de la Asociación campeona del mundo, Claudio "Chiqui" Tapia parece haberle ganado al presidente de la Nación, Javier Milei, y al ex primer mandatario Mauricio Macri, el primer round internacional de la larga pelea por la conversión de los clubes de fútbol en sociedades anónimas deportivas. Los dictámenes de FIFA y Conmebol avalando la postura de que solo AFA está habilitada para determinar la naturaleza jurídica de sus clubes afiliados robustecen la posición de Tapia como principal defensor del formato de sociedades civiles sin fines de lucro que las instituciones se dieron a si mismas desde que comenzaron a ser fundadas a fines del siglo diecinueve.