El desahogo por el triunfo quedó atrás. La misión de River en el compromiso ante Atlético Tucumán era lograr la victoria tan deseada en la Liga Profesional, algo que no había podido lograr desde el retorno de Marcelo Gallardo a la conducción del plantel.
El técnico, precisamente, decidió afrontar el encuentro con la mayoría de los futbolistas que habitualmente son titulares, a pesar del compromiso que tendrá el martes próximo por la Copa Libertadores. Dos que tal vez puedan arrancar el partido ante Colo Colo serían Mastantuono y Paulo Díaz, que no estuvieron ante los tucumanos.
Las especulaciones previas sostenían que presentaría muchas modificaciones. Sin embargo, la necesidad del triunfo lo llevó al técnico a tomar otra decisión. El nivel de juego del equipo continuó siendo irregular en el inicio, y cuando apenas habían pasado diez minutos, el visitante se puso en ventaja con un gol de Franco Nicola.
El volante uruguayo definió con un toque suave, en una acción que había comenzado con una desatención de González Pírez. El marcador central de River se pudo reivindicar 14 minutos después, cuando fue a buscar un tiro de esquina al área rival y terminó convirtiendo el empate con un golpe de cabeza.
El nivel de ambos era equilibrado. River era el que buscaba instalarse en el campo rival, y Atlético esperaba para salir rápido cuando recuperaba la pelota, apostando a un error del conjunto local.
La incertidumbre llegó al final del primer tiempo, cuando Borja festejó un gol luego de un cabezazo, pero el partido continuó su desarrollo. El VAR tuvo que corroborar, luego de unos minutos, que la pelota había ingresado en su totalidad para confirmar el tanto.
Atlético Tucumán salió más decidido al jugar el segundo tiempo, y en los primeros segundos Bajamich estrelló un remate en el palo. De todas maneras, cuando Maximiliano Meza convirtió el tercer gol con un golpe de cabeza, luego de una gran combinación entre Acuña y Lanzini, el partido quedó definido para el local. Y el ingresado Facundo Colidio decoró el 4-1 como resultado final.
La mira le apunta ahora a dos objetivos: Colo Colo por la Copa Libertadores, y Boca el fin de semana próximo por el certamen local. El desahogo por el triunfo quedó atrás.