Un misil disparado por los rebeldes hutíes de Yemen cayó este domingo cerca del centro de Israel. El ataque, que no dejó víctimas, profundiza las tensiones en Oriente Medio, casi un año después del inicio de la guerra en Gaza.
"Esta mañana, los hutíes lanzaron un misil tierra-tierra desde Yemen hacia nuestro territorio", dijo el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtiendo que los rebeldes "ya deberían saber que cobramos un alto precio por cualquier intento de hacernos daño".
Horas antes, el ejército israelí había indicado que fue identificado un misil "cruzando el centro de Israel desde el este" y que cayó en un área abierta sin causar heridos. La fuerza precisó que el proyectil "fue disparado desde Yemen" y que las explosiones procedían de su sistema de intercepción de misiles.
Las sirenas se activaron en el centro de Israel antes de la llegada de los misiles y muchas personas se apresuraron hacia los refugios en la región de Tel Aviv. Según los servicios de rescate israelíes, nueve personas resultaron heridas leves cuando se dirigían a los refugios. Además, en la ciudad de Lod, los bomberos tuvieron que intervenir para apagar un incendio provocado por la caída de restos de un misil.
El portavoz militar de los hutíes, Yahya Sari, afirmó que el ataque, llevado a cabo con "un nuevo misil balístico hipersónico", iba dirigido contra una posición militar en Jaffa, una ciudad portuaria cerca de Tel Aviv, y que el proyectil alcanzó su objetivo puesto que "las defensas del enemigo no pudieron interceptarlo".
Hamas, en tanto, se felicitó por el lanzamiento de los rebeldes hutíes de Yemen y dijo que Israel no estará a salvo hasta que detenga su "brutal agresión" en la Franja de Gaza.
"Consideramos que esta es una respuesta natural a la agresión contra nuestro pueblo palestino. Afirmamos que el enemigo sionista no estará en seguridad hasta que detenga su brutal agresión contra nuestro pueblo en la Franja de Gaza", dijo el movimiento islamista palestino en un comunicado.
Antecedentes
No es la primera vez que rebeldes hutíes de Yemen lanzan ataques contra Israel en solidaridad con los palestinos desde que estalló la ofensiva israelí en la Franja de Gaza tras el ataque de Hamas el 7 de octubre.
En julio, lanzaron un ataque con dron contra Tel Aviv, en el que murió un civil. Como represalia, aviones de combate israelíes bombardearon el puerto yemení de Hodeida, controlado por los hutíes. El jefe de los rebeldes afirmó entonces que era "inevitable" una respuesta a ese ataque.
Los hutíes pertenecen al llamado "eje de la resistencia" de Irán, que incluye grupos respaldados por Teherán en Irak, Siria y Líbano.
Desde noviembre, los hutíes han lanzado una oleada de acciones contra buques gvinculados a Israel en el golfo de Adén y el mar Rojo.
Guerra en Gaza
En el terreno, el ejército israelí continúa su ofensiva en la Franja de Gaza, donde se registraron varios bombardeos nocturnos y disparos de artillería, según periodistas de AFP y la Defensa Civil.
Al menos tres personas murieron y varias resultaron heridas en un bombardeo contra una vivienda en el campo de refugiados de Nuseirat, en el centro. Más al norte, en el campo de refugiados de Jabaliya, una persona murió y tres resultaron heridas en otro bombardeo contra una casa.
La guerra estalló el 7 de octubre con el ataque de Hamas en el sur de Israel, que provocó la muerte de 1.205 personas, incluyendo los rehenes muertos o asesinados en cautividad, según un recuento de AFP en base a datos oficiales israelíes. Los comandos islamistas secuestraron ese día a 251 personas, 97 de las cuales siguen retenidas en Gaza y 33 han sido declaradas muertas por el ejército israelí.
La campaña militar de Israel contra la Franja de Gaza dejó por el momento 41.206 muertos, según el Ministerio de Sanidad de este territorio gobernado por Hamas. La guerra ha provocado también una catástrofe humanitaria y el desplazamiento de casi la totalidad de los 2,4 millones de habitantes del pequeño territorio.